El primer secretario del PSC, Miquel Iceta, ha dicho este lunes que el PSC valorará sumar con otros partidos ante las próximas elecciones para representar «un catalanismo fuerte», aunque sin renunciar al proyecto político propio de su partido.
«Un catalanismo fuerte, y el PSC quiere representar eso, podría en estos momentos representar a gente que quizás no se sienten parte del proyecto del PSC», ha afirmado una entrevista en el canal 324.
Ha asegurado que el PSC se encuentra en una situación «que ya la querrían otros» en cuanto a peticiones de colaboración ante las elecciones catalanas, y que trabajarán para sacar adelante.
Según Iceta, las valorarán sin apartarse de lo que consideran que no es negociable, según su proyecto político: el Estado del bienestar, y encontrar la forma de salir «del callejón sin salida del autogobierno» en Catalunya.
Preguntado por una redición del acuerdo electoral con Units per Avançar, ha afirmado que el pacto de 2017 «ha funcionado muy bien» y que ahora ambos partidos están en conversaciones pare decidir si lo repiten.
HAY TRUMPISMO EN CATALUÑA
A raíz de las elecciones en los Estados Unidos, Iceta ha asegurado que en la política catalana hay «elementos» de populismo que también se dan en la norteamericana, como la división, la crispación y la confrontación, en sus palabras.
Preguntado por quiénes serían ‘trumpistas’ en Cataluña, ha dicho que lo serían los que «relativizan la legalidad y erosionan las instituciones» aunque ha rechazado señalar a nadie porque lo considera de mala educación.
LA PANDEMIA EN CATALUÑA
En cuanto a la gestión de la pandemia, el PSC –ha dicho– apoya las medidas de la Generalitat aunque no comparte la forma en que se han gestionado algunas de ellas: «Es verdad que en algunos aspectos tenemos críticas: en la reapertura de la atención primaria vamos lentos, y en el rastreo se podrían haber hecho las cosas de otro modo».
No obstante, ha mantenido que el Govern «está asesorado por buenos expertos y tiene un conocimiento muy detallado» de la situación, y ha destacado especialmente la labor del secretario de Salud Pública, Josep Maria Argimon.
PGE
Sobre la negociación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE), ha asegurado que les gustaría que les votara todo el mundo aunque sea poco probable, y ha añadido: «La no aprobación sería temeraria, desde nuestro punto de vista, y respetando la opinión de todo el mundo».
Ha asegurado que la reforma del delito de sedición permite encontrar caminos de entendimiento, aunque considera que «no tiene que ver» la negociación de los PGE, aunque sea conveniente, ha dicho.
Además, ha lamentado vetos entre formaciones en la negociación –en alusión a ERC Y Cs–, porque lo que tendría que decidir el voto es «el contenido de la propuesta», y ha añadido que le gustaría sacar adelante las cuentas públicas adelante con los votos de la mayoría de la investidura.