La carbonara es una salsa tradicional de la gastronomía italiana, que hemos adoptado en España y en el resto del mundo. Pero, ¿se parece en algo nuestra forma de prepararla, a la receta original? Con la carbonara pasa como con muchos platos típicos, que se van modificando en los distintos países y regiones, y al final aparecen variantes propias con su toque particular. Los cocineros profesionales también gustan de reinventar las antiguas recetas y transformarlas en algo nuevo. La cocina es así, creativa y adaptable, pero a veces platos de antaño se van transformando hasta el punto de que se convierten en algo diferente. Eso ocurre mucho con recetas de la gastronomía internacional y la carbonara es un claro ejemplo.
4OTROS USOS
Aunque asociamos la carbonara con los espaguetis y de hecho esa es la receta que hemos compartido, también se puede utilizar de otras formas, aunque de nuevo no estemos siendo fieles a la tradición. Podemos usar esta salsa para cubrir pizzas, otro tipo de pastas como macarrones (se recomiendan los rayados, porque ‘agarran’ mejor la salsa), o ñoquis. En realidad cualquiera de sus versiones es una delicia, pero como ves, la auténtica es mucho más fácil y ligera, y si la pruebas, puede que te guste incluso más que la versión con nata que conocemos aquí.