La carbonara es una salsa tradicional de la gastronomía italiana, que hemos adoptado en España y en el resto del mundo. Pero, ¿se parece en algo nuestra forma de prepararla, a la receta original? Con la carbonara pasa como con muchos platos típicos, que se van modificando en los distintos países y regiones, y al final aparecen variantes propias con su toque particular. Los cocineros profesionales también gustan de reinventar las antiguas recetas y transformarlas en algo nuevo. La cocina es así, creativa y adaptable, pero a veces platos de antaño se van transformando hasta el punto de que se convierten en algo diferente. Eso ocurre mucho con recetas de la gastronomía internacional y la carbonara es un claro ejemplo.
3PREPARACIÓN DE LOS ESPAGUETIS CON SALSA CARBONARA
Para preparar la pasta utilizaremos unos 3 litros de agua, porque es importante que los espaguetis se cuezan en agua muy abundante. La ponemos al fuego en una olla grande y cuando rompa a hervir ponemos 30 gramos de sal, preferiblemente sal gruesa. Introducimos la pasta y en cuanto recupere el hervor empezamos a contar el tiempo de cocción según las indicaciones del fabricante. La pasta tiene que quedar al dente.
Mientras tanto nos ponemos a preparar la salsa. Troceamos el tocino en tiras pequeñas de aproximadamente 1 centímetro y lo ponemos en la sartén con un poco de aceite durante 10 minutos hasta que se dore. Por otra parte, tomamos un cuenco y batimos los huevos junto con el queso rallado y un poco de pimienta al gusto, hasta que quede todo perfectamente mezclado. Cuando la pasta esté lista la colamos, reservando un par de cucharadas del agua de cocción. Ponemos los espaguetis en la sartén junto con el tocino, y lo removemos para que se mezcle. Después vertemos la mezcla del queso con el huevo y removemos de nuevo rápidamente para impedir que el huevo cuaje. Si la pasta queda un poco seca para nuestro gusto, podemos añadir un poco del agua de cocción que hemos reservado, y mezclamos hasta que quede una textura perfecta. Se sirve decorando con un poco de queso rallado y una pizca de pimienta.
