El confinamiento que hemos vivido quizá pensamos que a nosotros nunca nos tocaría. A lo largo de la historia, este tipo de encierros ha estado relacionado con la política, sobre todo dentro de las fronteras de nuestro país. De hecho, una gran cantidad de personajes célebres se han visto obligados a no salir de forma pública y vivir encerrados durante gran parte de su existencia. ¿Te imaginas que la cuarentena hubiera durado para siempre?
El origen de la palabra confinamiento, no en vano, significa reclusión vigilada y forzada. Se ha dado, normalmente, por problemas de ideología, funcionando como un castigo hacia el sublevado. En nuestro caso, por supuesto, no ha sido así. Pocos pensábamos que íbamos a revivir historias del pasado debido a la llegada de la pandemia por el coronavirus.
Por eso, sí, es cierto, nosotros nos quejamos del confinamiento, pero sabemos cuáles fueron los peores encierros de la historia.
4Persiguiendo la cultura: el confinamiento de Jovellanos
Volviendo a España, el escritor, jurista y político reconocido Gaspar Melchor de Jovellanos también vivió sus propios encierros. Fue encauzado hacia el confinamiento por Carlos IV, al iniciarse la Revolución Francesa.
Por eso, el ilustrado tuvo que abandonar la Corte, siendo desterrado a su lugar natal. Fue siempre fiel a su patria pero, aún así, vivió marginado en Gijón. Además, corrió la suerte de vivir dos encierros pues, después de un breve tiempo en activo, volvió a ser recluido.
La segunda vez fue en Mallorca, en el interior del monasterio de la Real Cartuja de Jesús de Nazaret y también en la prisión del castillo de Bellver. Sin duda, una vida dura y muy convulsa.