Ahora que las temperaturas empiezan a bajar, no hay nada que apetezca más que guisos y platos de cuchara para ayudar al cuerpo a entrar en calor. Pero además, son platos sabrosos y sanos, que a la vez que nos sacian, ayudan a nuestro organismo a fortalecer sus defensas y a cuidarse en general. Las legumbres, por ejemplo, son alimentos llenos de minerales y vitaminas que nos cuidan y a la vez son muy bajas en calorías por lo que nos ayudan a adelgazar. Hoy queremos recomendarte esta receta de lentejas que tienen un efecto reconfortante maravilloso y además están para chuparse los dedos.
2Preparación y cocción de las lentejas
Antiguamente, antes de poner a hervir las lentejas, se limpiaban cuidadosamente y se dejaban a remojo en agua fría durante unas cuantas horas – normalmente la noche antes de prepararlas. En la actualidad, existen tipos de lentejas que no necesitan remojo, como la pardina por ejemplo. Cuando hayan remojado, o si utilizas la pardina, sin remojo previo, las pones en una cacerola con la hoja de laurel, media cebolla, un diente de ajo sin pelar y las cubres con abundante agua – sin sal. En cuanto empieza a hervir, las tapas y las dejas cociendo a fuego lento durante una hora y media aproximadamente.