El conseller de Interior, Miquel Sàmper, ha considerado «insuficiente» el decreto sobre el estado de alarma aprobado este domingo por el Gobierno, porque considera que no permite a la Generalitat adoptar medidas adicionales y necesarias para frenar el Covid-19 en Cataluña.
Ha asegurado que el Govern esperaba encontrar en el decreto «una respuesta a la altura del mes de marzo», en una rueda de prensa este domingo junto al subdirector de Protección Civil de la Generalitat, Sergio Delgado, y al comisario jefe de los Mossos d’Esquadra, Eduard Sallent.
Para él, el nuevo decreto «no es precisamente un ejemplo de cogobernanza»: más allá de las medidas ya vigentes en Cataluña que limitan las reuniones a seis personas y el aforo en actividades religiosas, solo permite aplicar el toque de queda –en vigor desde este domingo a las 22.00 horas– y restringir las entradas y salidas al territorio de la comunidad autónoma, ha afirmado.
«Esto no es un decreto de alarma. El decreto de alarma es la posibilidad de que todas las comunidades autónomas tuviéramos la posibilidad de restringir derechos fundamentales de forma excepcional», ha lamentado.
Según él, el propio decreto de marzo permitía muchas más restricciones, con carácter excepcional, y el nuevo vuelve «a caer en el error de centralizar» la gestión de la pandemia.
NUEVAS MEDIDAS
Preguntado por qué medidas querría adoptar el Govern, ha dicho que el nuevo decreto de alarma no permite, por ejemplo, cerrar toda la actividad desde las 18.00 horas de la tarde, como se ha aprobado en Italia.
Sobre si habrá cierres perimetrales en Cataluña, ha dicho que a partir del decreto sobre el estado de alarma el Govern trabaja en nuevas medidas para evitar un confinamiento «invasivo» y que se irán evaluando.
Las irán abordando y valorando según criterios técnicos y sanitarios en el marco del Procicat, y en colaboración con los agentes sociales y el mundo local.
UNA GESTIÓN DIFERENTE
Sàmper ha dicho que, ante la segunda ola, el Govern se propone abordar la gestión de la pandemia de forma distinta, porque son «conocedores del desgaste psicológico que supuso para la ciudadanía la primera ola».
«El Govern de la Generalitat empatiza con todos los catalanes. Lo estamos pasando todos, lo están pasando ustedes, muy mal. La situación es crítica, y la vacuna no llega», ha dicho.