El transporte es uno de los medios más afectados por la pandemia. Muchos ciudadanos, que pueden evitar desplazamientos innecesarios, que se producen por ocio o placer, los han suspendido para evitar exponerse al coronavirus. Sin embargo, miles de personas no pueden evitar algún medio de transporte diario, que los lleva a su lugar de trabajo o a su centro de estudios. ¿Qué hacer en estos casos? ¿Cómo evitar el contagio o minimizar el riesgo?
4Evita las aglomeraciones
El número de pasajeros en los trenes, metros o autobuses no es el mismo que antes de la pandemia. A pesar de que poco a poco se ha ido recuperando la demanda, no ha vuelto a su nivel habitual. Por una parte, porque todavía hay muchos empleados teletrabajando, y por otra porque muchas personas siguen evitando el transporte público en sus desplazamientos precisamente por miedo al coronavirus. De todos modos, sigue habiendo momentos en los que el metro o el tren están más saturados, las famosas horas punta, que coinciden con la entrada y salida de los trabajos o los colegios y universidades. Son precisamente esos momentos, en los que se produce un mayor punto de exposición al virus, pues en muchos casos la distancia de seguridad se antoja imposible. Lo recomendable es que evitemos esas horas punta, pero no siempre es posible. Así que al menos, deberíamos intentar cambiarnos de vagón a uno que esté menos lleno. También es recomendable dispersarse a lo largo del andén, y no permanecer en el mismo punto de espera que otras personas.