Aún no nos hemos sobrepuesto de la decisión que tomó el actual rey Felipe VI de renunciar a la herencia de su padre, el rey emérito Juan Carlos. Además, la decisión no quedaba solo hay, sino que también le quitaba la paga anual que le corresponde por sus servicios al Estado. Con la familia más desestructurada que nunca, es un buen momento para fijarnos en qué diferencias existen entre el reinado del padre y del hijo.
Aunque sean padre e hijo, eso no quiere decir que ambos piensen igual. Esto hace que tampoco actúen de la misma manera. Unos muchos más cercanos al emérito y otros que ofrecen su apoyo a la nueva forma de hacer las cosas de su hijo, lo cierto es que opiniones hay para todos los gustos. A pesar de ser tan cercanos en la familia, cada uno ha sabido ocupar su lugar como rey y resolver las cosas de forma distinta.
La Casa Real está en continuo movimiento y cada vez son más los escándalos que la sobrevuelan. Sí, son padre e hijo, pero así es el reinado de Felipe VI que lo diferencia de Juan Carlos.
5Austeridad, al contrario que su padre
Para llevar a cabo sus funciones y cumplir el deseo de bajar el saldo negativo de la Casa Real de una vez por todas, tanto Felipe VI como Letizia Ortiz decidieron que había llegado el momento de actuar con mucha más austeridad.
Cuando el rey subió al trono, la recuperación económica después de la crisis aún no era total. Por ello, decidieron hacer recortes también en su casa y asistir a menos viajes oficiales que los reyes antecesores, entre otras cosas.
Además, también decidieron reducir el número de miembros que pertenecen a la Familia Real, dejando solo a los eméritos, los propios reyes y sus hijas, Leonor y Sofía.