García Torres, nombrado por Iglesias, prepara con total opacidad la prohibición de exóticos

La transparencia no es el punto fuerte de algunas áreas del Ejecutivo. Hay una dirección general que depende directamente del vicepresidente del Gobierno y líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, que se ha tomado la discreción y la opacidad como norma, a pesar de que están trabajando en una ley que tendrá una fuerte repercusión en España. Se trata de la Dirección General de Derechos de los Animales, un área dirigida por Sergio García Torres que tiene por encargo elaborar una nueva ley de Bienestar Animal donde se incluirán muchos cambios, entre ellos, la prohibición de la tenencia de exóticos como animales de compañía. Sin embargo, mientras García Torres trabaja en esta ley, su departamento de prensa se ha tomado por norma el escurrir el bulto y no contestar a quienes se interesan por el proyecto, ya sean comerciantes afectados o los propios medios de comunicación

Todo estalló cuando un técnico del Gobierno dejó caer en una entrevista que el Ejecutivo estaba trabajando en una nueva ley que acabaría con la tenencia de exóticos. Según detalló en Cuatro Luis Mariano González, jefe del Área de Acciones de Conservación de la Subdirección General de Biodiversidad Terrestre y Marina del Miteco, el proyecto solo permitiría tener perros y gatos como mascotas, pero la verdad es que la vicepresidencia de Transición Ecológica dirigida por Teresa Ribera, que sí ha dado la cara tras estas declaraciones, insiste en que, primero, consideran que no hay nada palpable sobre la mesa y, segundo, que quien tiene el encargo de desarrollar esta ley es el departamento de Torres, que ha tomado la opacidad por norma, pues ni siquiera contestan a las preguntas cuando se accede a su dirección general.

Son muchos los comerciantes que se mantienen al pie del cañón sin recibir respuesta. Al margen de cuestiones ideológicas, hay muchos autónomos (y aficionados) que viven de la conocida como terrariofilia y quieren obtener una respuesta, pues si Torres tiene la ocurrencia de prohibir la tenencia de exóticos muchos negocios se arruinarán y sus propietarios tendrán que cambiar su modo de vida. Pero la Dirección General de Derechos de los Animales prefiere que nadie sepa cómo está el tema y en qué consistirá su nueva ley, cargada de tintes ideológicos y de poca comunicación con quienes se verán perjudicados por las ocurrencias de García Torres.

Han bastado más de diez llamadas a lo largo de todo el verano (y parte del otoño) para tirar la toalla. Este medio se ha puesto en contacto en repetidas ocasiones con el departamento que dirige Torres, pero la norma que ha dado García Torres es evidente: desviar toda llamada y ni siquiera responder con evasivas, sino dar largas hasta que quienes se interesan por esto se cansen. No somos los únicos, pues prácticamente cualquier comerciante o aficionado que lo ha intentado, la respuesta ha sido la misma.

La parte socialista del Gobierno sí que se ha mostrado más sensible con este tema y han respondido en lo que han podido. Consideraron que las palabras del técnico del Gobierno, el jefe del Área de Acciones de Conservación de la Subdirección General de Biodiversidad Terrestre y Marina del Miteco, se sacaron de contexto y que se lanzó a dar unas afirmaciones que están muy lejos de materializarse con el tiempo. Sus palabras exactas fueron que se estaba haciendo una “bola de nieve” con el tema en las redes sociales como Facebook o Twitter y que el Ejecutivo no ha hecho más que tantear la posibilidad.

Sobre los comerciantes, el área socialista también fue clara: quiso mandar un “mensaje de tranquilidad” a quienes viven y dependen de esto (no solo de la venta de mascotas exóticas, sino también de terrarios, alimento o decoración) y asegurar que las palabras del técnico no son lo que parecen. Pero sí que insistieron en el hecho de que en realidad la ley de Bienestar Animal depende de García Torres. Y éste y todo su departamento de comunicación se niegan si quiera a atender a los comerciantes.

La ley de Bienestar Animal y la dirección general que creó Iglesias en la que colocó con un elevado sueldo a García Torres tiene por objetivo endurecer las penas contra el maltrato animal, así como tocar otros asuntos que competen a los animales. Sin embargo, la forma con la que lo hará, según fuentes consultadas por este medio, no será la más directa. Al igual que el Gobierno tuvo la ocurrencia de prohibir la tenencia de pitones reales por ser una especie “potencialmente invasora” a pesar de que el animal no sobrevive a bajas temperaturas, García Torres se plantea usar esta torpe fórmula para prohibir la tenencia de otros muchos animales exóticos. Veremos por donde sale, pues solo queda esperar a que la Dirección General de Bienestar Animal tenga a bien abrazar la transparencia y responder sobre sus intenciones.