Una de las mejores cosas del otoño son las castañas, el símbolo por excelencia de esta estación. Llegan los primeros días de frío y las calles se llenan del aroma de los puestos callejeros que nos tientan a comprar un cucurucho de castañas calentitas, tiernas y un poco dulces. Pero también podemos hacerlas en casa y tomarlas en cualquier momento, aunque no tengamos el brasero típico de las castañeras. El resultado es igual de bueno. Se pueden preparar de varias maneras.
5COCIDAS
Algunas personas prefieren las castañas cocidas, que también son muy fáciles de preparar. Después de hacerles un corte las introducimos en una cacerola y las dejamos cocerse durante unos 45 minutos desde que rompe el hervor. Transcurrido ese tiempo escurrimos el agua y las dejamos reposar hasta que se enfríen unos grados, no del todo porque si no serán muy difíciles de pelar. También se pueden hacer en una olla a presión en unos 3 minutos.