Una de las cosas que nos resultan más incómodas a la hora de mantener una relación con otras personas es el momento de ligar. Aunque hay gente que lo lleva mejor que otra, lo cierto es que a todos nos resulta un poco extraño el conocer a alguien de primeras. Ahora, podemos hacer una lista de cosas y respuestas que debemos tener claras a la hora de acudir a nuestra cita.
Para todas aquellas personas que cuentan con dificultades a la hora de flirtear con otros, el hecho de sentarse frente a alguien y hablar con él puede suponer todo un reto. Una de las razones más frecuentes es la timidez, también la poca confianza en uno mismo. Otras pasan por la falta de costumbre, sobre todo, si hemos estado en una relación muy larga o incluso casados.
Si te sientes identificado con esto, descubre las respuestas más eficaces para acabar con esos momentos incómodos a la hora de ligar.
Piensa en ti mismo a la hora de ligar
Aunque de lo que se trata es de conocer a otra persona, no podemos olvidarnos de nosotros mismos. Por eso, podemos realizar un ejercicio de introspección para determinar cómo somos. De este modo, las respuestas que necesitamos decir las podremos sacar de nuestro interior. Tenemos que pensar en qué solemos decir para no sobreactuar con nuestra cita.
La seducción es algo muy personal, por lo que ninguna técnica se puede estudiar al pie de la letra y tomarla como algo a seguir para triunfar en el amor. Primero tenemos que saber cómo somos para saber cómo debemos actuar ante nuestro acompañante. Cuanto más nos alejemos de nuestra personalidad, menos encajaremos con la otra persona.
Debemos tener en cuenta, antes de ponernos en marcha, una serie de factores. Estos, por ejemplo, pueden ser el tema del que deseemos hablar en nuestro encuentro, o el contexto en el que estemos. También debemos valorar nuestro estado anímico, así como otros externos.
El humor, el mejor arma para conseguir el amor
A la hora de encontrarnos con otra persona completamente ajena a nosotros, tenemos que esperarnos que quizá surjan una serie de preguntas incómodas que no sepamos cómo responder. La respuesta, ante este tipo de situaciones, siempre debe ser el humor. Como es lógico, el humor tomado de la mejor forma. No hace falta ir de gracioso, sino tener reservados algunos comentarios ingeniosos con los que aumentar el interés de nuestra pareja.
Una de las cosas que más nos gustan es que nos sorprendan. Por eso, a la hora de ligar, debemos mostrarnos ingeniosos para no resultar aburridos ni demasiado monótonos. Cuando nos hagan una pregunta que no nos cuadre demasiado, podemos hacer alguno de estos comentarios, siempre de forma suave, para saber llevar el tema a nuestro terreno. El objetivo es saber llevar la conversación.
Pero, ¿cómo conseguimos mostrarnos así de seguros? Lo mejor es mostrar nuestra naturalidad a través de posturas relajadas. De hecho, a la hora de tener respuestas guardadas debajo de la manga, podemos cambiar las palabras por el lenguaje no verbal. La mejor defensa, como dicen, es un buen ataque. En este caso, la mejor forma de «atacar» es haciendo las preguntas adecuadas para que no haya momentos incómodos o, en su caso, mostrándonos completamente seguros a través de la postura que tengamos. Hombros relajados, no cruzar los brazos, mirar a los ojos durante la conversación… Todo eso son respuestas automáticas que nos pueden salvar esos momentos.
Elogiar a la otra persona, una buena forma de empezar
Los cumplidos pueden ser una buena forma de evitar los momentos incómodos, por lo que los podemos añadir a nuestra lista de respuestas y comentarios ingeniosos. Por supuesto, no podemos excedernos en este tipo de elogios, pues corremos el riesgo de conseguir justo lo contrario. De ahí que existan tantas contradicciones a la hora de aconsejar sobre ligar.
Bien empleados, los elogios como respuesta generan empatía. Esto es perfecto para matar esos momentos incómodos en el encuentro y dar pie a comenzar una buena conversación. Podemos destacar cualidades psíquicas y físicas de la otra persona que nos impresionen. De acuerdo a las reacciones que vayas viendo en tu pareja, sabrás si vas por el camino indicado. Para no pasarnos, nosotros mismos debemos marcar también límites y estar atentos tanto a nuestro lenguaje no verbal como al de la otra persona.
Como todo en la vida, que la otra persona reaccione de forma negativa a los elogios o respuestas por tu parte es algo que no se puede saber. La razón es que cada persona puede interpretar de formas distintas el mismo cumplido, por lo que nunca sabremos si a nuestro interlocutor le gustará o no escuchar algo de este tipo. Por eso, si lo intentas y no tiene buena acogida, lo mejor es intentar otra forma de pasar la incomodidad.
La amabilidad, otra de las respuestas que funcionan a la hora de ligar
Si la persona que está hablando contigo te empieza a contar sus problemas, no dejes que con esto cree una atmósfera incómoda. Muéstrate siempre amable e interesado en lo que está contando. Probablemente, esa persona necesita abrirse y ha visto en ti a alguien de confianza con quien poder hacerlo. Además, si notas que necesita tu ayuda, echa una mano en la medida que puedas.
De este modo, mostrándote amable y solidario, conseguirás crear una atmósfera agradable y de confianza, lo que aumentará el interés de la otra persona. Es una gran respuesta ante los momentos incómodos, pues verá que eres una persona con la que se puede contar y que, además de estar interesado en ligar, también lo estás en ofrecer una amistad más profunda.
No te precipites en tus comentarios ni en tus respuestas. Escucha bien y, después, di lo que piensas. No intentes forzar la situación y tampoco te muestres arrogante, pues puede conducir a error. De hecho, tampoco es bueno mostrarse demasiado humilde, por lo que es recomendable pensar tan solo en cómo eres y buscar la mejor forma de proyectarlo.