La muerte de una mujer en las últimas horas, también vinculada a la residencia DomusVi de Outeiro de Rei (Lugo), ha elevado a 716 las víctimas mortales diagnosticadas con COVID-19 desde el inicio de la pandemia.
Fuentes de la Consellería de Sanidade ha informado en la tarde de este domingo del fallecimiento de esta mujer, de 85 años y con patologías previas, que permanecía ingresada con coronavirus en el Hospital Universitario Lucus Augusti (HULA).
Previamente este mismo domingo, las autoridades sanitarias gallegas habían notificado las muertes de otras tres personas en Lugo, de las que dos también estaban relacionadas con el geriátrico de Outeiro. En concreto, se trata de una mujer de 85 años que estaba ingresada con COVID en el HULA y otra de 88 que perdió la vida en el interior de la residencia.
A mayores, sin tener ningún vínculo con ningún centro, ha perdido la vida un hombre de 96 años que permanecía hospitalizado en el HULA.
Con los cuatro decesos notificados por Sanidade este domingo –uno menos que el sábado–, las víctimas que deja la pandemia de COVID-19 en la Comunidad gallega ascienden a 716. Además, el área sanitaria lucense, que acapara todas las muertes de la jornada, ha superado los 80 fallecidos en centros hospitalarios y se ha colocado en 81.
95 FALLECIDOS EN LA ‘NUEVA NORMALIDAD’
Desde el comienzo de la ‘nueva normalidad’, el número de pacientes fallecidos con la enfermedad en Galicia es de 95, tras la muerte de una mujer el 7 de agosto.
Antes de eso, la Comunidad había encadenado casi dos meses –desde el 10 de junio– sin decesos relacionados con el coronavirus. Este miércoles, Galicia superaba los 700 fallecidos.
El mayor balance de muertos de los últimos meses se notificó el pasado miércoles, cuando Sanidade informó de un total de siete. La última vez que se superó esta cifra fue el pasado 5 de mayo, con nueve decesos.