Las autoridades de la Comunidad de Madrid anunciaron este viernes que el servicio de policía será esencial a la hora de asegurar el cumplimiento de las nuevas restricciones anunciadas por la presidenta Díaz Ayuso para las 37 zonas señaladas. La Policía Local será el principal órgano dedicado a este fin, pero podrán contar con el apoyo de la Nacional y Guardia Civil, e incluso de militares si es necesario.
Mientras el Gobierno de la capital afirma sufrir dificultades para reforzar la Atención Primaria, Almeida adelantó que se desplegarán refuerzos policiales para las zonas rojas. No quiso detallar demasiado, ya que este sábado se reuniría con los servicios de emergencia municipales y los 21 concejales de los distritos afectados. «Todas las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado van a trabajar con la profesionalidad que ya han demostrado», dijo el alcalde.
«Las bolsas de médicos sanitarios están a 0», explicó paralelamente este sábado el consejero de Salud de Madrid, Enrique Ruíz Escudero. Asegura que las vacaciones de los sanitarios unidas a las bajas por enfermedad han dejado secas las reservas de médicos.
Debido a lo abstractas que resultan las medidas tomadas en algunos sentidos (puede resultar difícil comprobar si una persona presenta una razón legítima de fuerza mayor para cambiar de territorio), harán de esta una labor difícil para los cuerpos policiales. Escudero detalló que se efectuarán controles aleatorios y disuasorios para asegurar el cumplimiento.
Dado que la mayoría de zonas ‘semi-confinadas’ pertenecen al cinturón sur de Madrid, las nuevas medidas han causado gran polémica, que se ha traducido ya en una movilización en la Puerta del Sol, que tuvo lugar este viernes por la noche en contra de las restricciones anunciadas por la Comunidad. Almeida tachó esta manifestación de «irresponsable», calificativo que ha reprochado la oposición, recordándole que no habló de la misma forma sobre las de Núñez de Balboa.
COMPARAN MADRID CON UNA DISTOPÍA
Algunos ciudadanos han criticado que se fortifiquen los cuerpos de seguridad en estos momentos, en lugar de apoyar económicamente a la sanidad pública. En este marco, el periodista Pedro Vallín aquejaba este viernes: «Dice el alcalde que tranquilos, que habrá más policías. Tiene sentido: si no vamos mejorar la atención sanitaria, lo mejor es poner a gente con armas que controle a los infectados. Todos hemos visto ‘Guerra Mundial Z'».
El economista liberal Juan Ramón Rallo esgrime la opinión contraria, opinando que el hecho de que la mayoría de barrios a los que se les ha aplicado restricciones sean del sur no indica ningún tipo de prejuicio social.
TÁSERS PARA LOS POLICÍAS
Estas noticias llegan a la vez que la policía municipal se prepara para recibir una equipación de pistolas táser en octubre. Un total de 175 dispositivos, a los que se sumarán mas en el futuro, que se entregarán a todas las unidades de la Municipal. Martínez-Almeida anunció justo hace un año su plan para dotar al cuerpo de estas nuevas armas paralizantes.
Las situaciones para las que se usarán estas pistolas serán aquellas en las que «se deba hacer uso de la fuerza sin emplear armas de fuego, ofreciendo una alternativa moderada en situaciones de crisis al constituir esta herramienta un sistema técnico incapacitante».