La receta de los Huesitos que puedes hacer en casa (y más sanos)

Si hay algo que hemos aprendido con esto de la pandemia por el coronavirus, es a cuidarnos en todo momento, y el hecho de estar todo el día encerrados en casa, implica que se nos presente mucha ansiedad de comer algo distinto. Pues bien, no es un secreto para nadie que hacer preparaciones en casa es algo sumamente importante, y últimamente ha adquirido mucha fuerza por lo del confinamiento. Llevar un estilo de vida saludable, pero a su vez, complaciendo el paladar, es ese tipo de atractivos que la verdad todos queremos, y más porque necesitamos ampliar ese gusto con recetas que nos solucionen una tarde, o el día entero. En este ámbito están los Huesitos, muy popular, rico, y ahora lo puedes hacer tu mismo.

La verdad es que no tienes que ser un profesional en este arte de las culinarias para que te apuntes a estas versiones, pues todo será sencillo, mucho más de lo que te puedas imaginar. Al final de la jornada, estarás feliz, porque has probado una delicia, y te invita a probar más y más. Podríamos decir que los Huesitos son una especie de adicción, pero en el buen sentido de la palabra. Como queremos que hagas la receta, te presentamos las claves para que hagas los mejores Huesitos en casa y que también sean sanos. Descúbrelo ahora mismo.

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Cómo hacer Huesitos caseros

Lo primero que debes hacer para estos Huesitos, es templar ligeramente la crema de cacao con avellanas para que sea más fácil a la hora de untar sobre los barquillos. Te recomendamos darle un toque de calor en el microondas, o puede irte al método tradicional baño de maría. Reservas unos 6 barquillos, y el resto lo vas a untar con la crema de cacao y los vas colocando de cuatro en cuatro.

Vas a tener seis pilas que debes cubrir con las seis que has dejado reservado anteriormente. Procedes a dejar por uno 12 minutos en la nevera o hasta que vas que haya endurecido. Una vez realizado este paso, cortas cada pila de barquillos en tres partes iguales usando un cuchillo de sierra, con esto te aseguras que queden perfectos. Posteriormente, troceas el chocolate y lo colocas en un cuenco junto con el aceite.