Carla Barber es mucho más que una doctora especializada en medicina estética. Esta canaria de 30 años fue ganadora de Miss España en 2015 y ahora mismo está inmersa en su exitoso negocio, ya que es dueña de tres clínicas (Valencia, Madrid y Las Palmas) donde se realizan cirugías estéticas y tratamientos anti envejecimiento. Una de las cruzadas que se ha propuesto esta doctora es desmitificar este tipo de intervenciones y convertirlas en una opción accesible a todo el mundo, incluyendo a las personas que tienen menos medios. Algunos colegas de profesión la han criticado por emplear métodos poco convencionales, pero a Carla le va muy bien, como se puede comprobar en sus redes sociales donde cuenta unos cuantos millones de seguidores.
Pero como decíamos, es más que una profesional de la medicina estética, porque tiene un perfil de celebrity que también se ha dedicado a explotar. Después de ostentar su corona de Miss y trabajar como modelo, se dio a conocer en televisión participando en ‘Supervivientes’, donde estuvo a punto de ser finalista. Pero su último empujón mediático lo ha conseguido gracias a su noviazgo con Diego Matamoros y con la reciente remodelación facial de su suegro Kiko, que se sometió a una cirugía de rejuvenecimiento y ha quedado casi irreconocible.
Así que a Carla Barber le va bien y se ha marchado con su chico de vacaciones a Ibiza, esa isla a la que los famosos peregrinan anualmente para lucir sus cuerpos bronceados en bañador. Y por supuesto, lo que no se muestra en redes es como si no hubiese ocurrido, por eso los dos jóvenes no han podido dejar de subir sus idílicas fotos demostrando su amor en distintos escenarios. Pero uno en concreto ha llamado especialmente la atención. Una imagen de la pareja en la cubierta de una embarcación donde se aprecia el pie de Carla de un tamaño gigantesco. No sabemos si ha sido culpa de un photoshopeado mal hecho, o una simple cuestión de perspectiva, el caso es que las burlas y los memes han sido inevitables.