Cómo elegir la mejor carne en el supermercado

Cada vez más, los españoles tiramos de las carnicerías o secciones de refrigerados de los supermercados para comprar la carne. El motivo, en la mayoría de los casos es puramente de tiempo: ya que se va al supermercado para el resto de la compra, se aprovecha y también se hace el acopio de las carnes, ya sean de pollo, pavo, conejo, cerdo o ternera. Aunque en cierto modo compramos por la vista, no siempre elegimos la mejor carne del supermercado, pues no esta no tiene por qué ser la que mejor apariencia muestra. Los expertos en carnes nos han explicado los trucos para elegir la buena carne de entre toda la que se vende en el supermercado.

2
CADA CORTE, PARA SU COCCIÓN

Lo más importante para hacer un primer cribado de las carnes que tenemos ante nosotros en el supermercado es pensar en el tipo de receta y cocción que vamos a emplear, pues cada modalidad requiere un tipo de corte de la carne. En cuanto a fileteados, lo ideal es el lomo, el solomillo, la babilla, la tapa (del jamón), la aguja (el pecho) o la zona del cantero o lumbar. Para los asados, mejor carnes más jugosas y con carne entrevelada como el redondo o la contra. Los guisos son adecuados para zonas como los morcillos que contienen mucho nervio y mucha vena, por lo que se hace más dura para filetes.

Para los caldos, mejor tirar de huesos o zonas con grasas como la falda o el pescuezo; mientras que para hacer carne picada, lo ideal son zonas «blancas» como la espaldilla.