Barcelona es de las ciudades españolas más imponentes. Cada uno de sus espacios dan muestra de una enorme diversidad cultural, que cualquier persona quisiera conocer. La historia de nuestro país es rica, diversa, abre un abanico de posibilidades para comprender el porqué de las cosas que vemos diariamente, cuando salimos a dar un paseo en sus acogedoras calles y sitios emblemáticos que forman parte indispensable de ese Conjunto Histórico Artístico que hemos heredado dignamente desde siglos pasados. Por cierto, muchos dragones aluden a esa historiografía.
Barcelona, además de ser una tierra llena de maravillas, es considerada la cuna de los dragones; una ciudad que reparte en diversos rincones más de 400 esculturas que rinden tributo a estas criaturas fantásticas y reveladoras que podemos observar en la actualidad. Es importante destacar, que la capital catalana cuenta con una amplia variedad de esculturas de los míticos dragones. Hay de todos los colores, de todos los tamaños, y de las formas más increíbles que no verás en ningún otro sitio.
Muchos turistas disfrutan de sus espacios, hurgan en los puntos más representativos de Barcelona para tomarse una foto, conocer la historia, y por supuesto, vivir una experiencia inolvidable. Como dato vinculante, las figuras están fabricadas en piedra y madera, así como también puedes encontrarte mosaicos, hierro forjado y materiales de todo tipo. Descubre los secretos de estos dragones, y la relevancia que tiene a nivel del turismo histórico que se hace notar en esta importante ciudad.
4Los dragones de Gaudí en Barcelona
El arquitecto nacido en Barcelona, Antonio Gaudí, también se adentró a proponer estas maravillas simbólicas que adornan la imponente ciudad, que tiene de por sí muchos secretos desde el punto de vista histórico. Existen dos representaciones muy famosas que definen su ingenio como diseñador, aportando un estilo original. Uno de los más conocidos es el dragón del Parc Güell creado en trencadís .
No es más que una técnica que consiste en la aplicación de fragmentos de cerámica o piezas de vidrio cortadas en forma irregular para cubrir una superficie. Otro de los que tiene en su haber, no es tan conocido como el anterior, pero sí tiene una larga historia. Es una puerta de hierro forjado en la entrada de los Pabellones Güell en la zona alta de Barcelona en el barrio de Pedralbes (Av. de Pedralbes, 7.
Un punto relevante, es que hay dos edificios donde Gaudí mostró su sapiencia ante lo majestuoso de Sant Jordi. Es más, el edifico constituye la leyenda. Nos estamos refiriendo a la Casa Batlló y el techo es un dragón. La Torre Bellesguard de Barcelona, entra en este grupo de sitios donde se denota la presencia de dragones, y en lo más alto puedes ver esos detalles.