Años atrás, las actividades de las mujeres eran muy limitadas en diferentes ámbitos como el trabajo, el estudio, el derecho al sufragio y otras muchas funciones y actividades, entre las cuales se encontraba la escritura. Este hecho provocó que algunas escritoras se viesen obligadas a ocultar su verdadera identidad firmando sus obras con seudónimos masculinos.
Saber leer y escribir no estaba al alcance de todo el mundo y eran pocas las personas privilegiadas, la mayoría hombres. Pese a ello, muchas mujeres tenían talento y conocimientos para la escritura, pero tuvieron que ocultarse bajo una identidad de hombre para que sus libros viesen la luz. Te hablamos de algunas de estas mujeres.
1SIDONIE-GABRIELLE COLETTE, SUPLANTADA POR SU PRIMER MARIDO
Sidonie Gabrielle Collete fue una de las escritoras francesas que publicó libros con seudónimo masculino. Tras casarse en 1893 con el también escritor Henry Gauthier Villars, «Willy», fue suplantada por este.
Su esposo le pidió que escribiese una serie de novelas basadas en su experiencia personal, que recibirían el título de Claudine. Ella lo hizo y estas se distribuyeron firmadas por él, que fue elogiado por una obra que se convirtió en todo un fenómeno editorial.
Una década después de su matrimonio, Colette decidió divorciarse, publicando posteriormente Diálogos de animales, que fue la primera obra firmada por ella misma. A esta le siguieron decenas de ellas.