domingo, 24 noviembre 2024

Ninguna comunidad se plantea por ahora un estado de alarma

Las comunidades autónomas no se plantean de momento pedir al Gobierno central un estado de alarma individualizado para doblegar la curva de contagios por coronavirus, tal y como propuso este martes el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y han comenzado a reclamar la incorporación de rastreadores militares para frenar la expansión de la pandemia, con la Región de Murcia como la primera en solicitar refuerzos.

El presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, ha valorado la posibilidad del estado de alarma planteada por el Ejecutivo y ha afirmado que, si fuera necesario para garantizar la salud pública de los valencianos, «por supuesto» se acudiría a este mecanismo, para el que considera que ya hay una «seguridad jurídica», si bien el estado de la pandemia en la actualidad no lo requiere porque la situación en la comunidad está «controlada». «No es satisfactoria pero ahora no se dan las circunstancias para este planteamiento», ha dicho.

Su homólogo en Extremadura, el ‘socialista’ Guillermo Fernández vara, ha considerado también que en su región «no se dan» las circunstancias «en este momento» como para solicitar al Gobierno central un estado de alarma y ha criticado al PP por «crear problemas» que, a su juicio, no existen.

Por su parte, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha agradecido el ofrecimiento de Sánchez, pero ha advertido de que la eficacia de esa medida está ligada a la movilidad entre regiones, como se puso de manifiesto durante los primeros meses de la epidemia. «La clave del estado de alarma reside en la movilidad, y si se adoptan medidas sin tener en cuenta este aspecto tendrían poca utilidad», ha insistido.

Más contundente se ha pronunciado el vicepresidente primero del Gobierno de Navarra, Javier Remírez, quien ha afirmado que el Ejecutivo foral no contempla «a día de hoy» pedir la declaración del estado de alarma. «En la situación en la que estamos y con las medidas que estamos tomando no sería necesario ni sería imprescindible», ha dicho Remírez.

En Cataluña, la consellera de Presidencia y portavoz del Govern, Meritxell Budó, ha explicado este miércoles que el Ejecutivo catalán debe estudiar detenidamente la invitación del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de declarar un estado de alarma individualizado ante el impacto del Covid-19 una vez conozcan «todos los detalles».

En esa misma línea respondió el presidente de la Generalitat catalana, Quim Torra, que afirmó que estudiará la propuesta del Gobierno y, una vez conozca todos los detalles, dará una respuesta al respecto.

Asimismo, el vicepresidente de la Junta de Andalucía, Juan Marín, ha manifestado que, «en este momento», no es necesario un «estado de alarma» en esta comunidad autónoma, al tiempo que ha acusado al jefe del Ejecutivo español, Pedro Sánchez, de «eludir su responsabilidad» en relación con este instrumento al plantear ayer que una región pueda solicitar su aplicación en su territorio.

Marín ha insistido que la propuesta de Sánchez no es una herramienta «ni ágil ni eficaz», al tiempo que «invade una competencia que por ley orgánica es sólo del jefe del Gobierno de España».

El presidente de Galicia , Alberto Núñez Feijóo, ha ratificado su rechazo a la vía de los estados de alarma individualizados. Al tiempo, ha anunciado que la Xunta, como autonomía «leal», ultima una propuesta alternativa que remitirá al Ejecutivo central: una nueva ley orgánica de salud para facilitar la gestión de la pandemia.

Por último, el Gobierno de Ceuta que preside Juan Vivas (PP) ha solicitado a la Secretaría General de la Asamblea un informe «jurídico» sobre si la Administración regional podría pedir con su rango institucional de Ciudad Autónoma la declaración de un estado de alarma limitado a su territorio, de apenas 19 kilómetros cuadrados.

También se ha pronunciado el Lehendakari, Iñigo Urkullu, que no cree que sea necesario que el Gobierno central decrete nuevamente el estado de alarma y ha defendido la actual coordinación y «comunicación permanente.

La presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, declaró que solicitará «todo aquello que haga falta si sirve para proteger la salud de los ciudadanos». Su homólogo en Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, advirtió al jefe del Ejecutivo de que la solución «no es ofrecer» a las Comunidades Autónomas el estado de alarma para su territorio y le acusa de «echarse de nuevo a un lado».

Además, el Gobierno de Baleares, Murcia, Aragón y Cantabria tampoco vieron necesario la aplicación, por ahora, de un estado de alarma individualizado para contener la expansión de la pandemia.

MURCIA, PRIMERA REGIÓN EN PEDIR RASTREADORES

Por su parte, el Gobierno de la Región de Murcia ha pedido este jueves al Gobierno central la colaboración de 60 de los rastreadores militares que éste ha puesto a disposición de las comunidades para reforzar el seguimiento de los casos activos de covid-19.

Así lo ha anunciado el consejero de Salud, Manuel Villegas, tras participar en la reunión del Consejo Interterritorial del Sistema de Salud presidida por el ministro del ramo, Salvador Illa, y celebrada para analizar la situación de la pandemia en todas las autonomías.

Villegas ha indicado que 60 es el número de rastreadores que correspondería a la Región de Murcia por población, teniendo en cuenta que el presidente del Gobierno central, Pedro Sánchez, ofreció unos 2.000 para todo el país.

Por otra parte, el Gobierno de Cantabria no ha descartado tener que recurrir a ellos. El consejero de Sanidad, Miguel Rodríguez, ha señalado que la región ha hecho «un esfuerzo inmenso» para contratar a rastreadores pero «no descarta tener que recurrir a esa medida».

El Ejecutivo gallego está interesado en el refuerzo de rastreadores de casos de la COVID-19 con militares y se ha dirigido al Ministerio de Sanidad para concretar los términos de la oferta. «Nos mostramos interesados, nos dirigimos al Ministerio de Defensa y ahora estamos pendientes de concreción», han trasladado fuentes de la Consellería de Sanidade. Entre las cuestiones que habría que ratificar estarían el número de efectivos y cuándo se producirían las incorporaciones.

El presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara, ha dicho «de momento» la comunidad está «bien», aunque «obviamente esto no es una foto fija, es una foto muy dinámica» y «si cambiara y fuera necesario» la región agradecería «enormemente» poder hacer uso de los rastreadores militares.

En esa misma línea, el Ejecutivo navarro no ha descartado el ofrecimiento, «como no descartamos utilizar todos los medios a nuestro alcance». «Si desde el Gobierno de Navarra se considera que tenemos que hacer uso -de los rastreadores del Ejército-, no lo descartamos», ha afirmado el vicepresidente, Javier Remírez.

Ante el anuncio de Sánchez de 2.000 efectivos del Ejército para realizar labores de rastreo, la consellera de Presidencia y portavoz del Govern catalán, Meritxell Budó, ha reivindicado la capacidad de rastreo de Cataluña que «se ha incrementado mucho» y ha añadido que es importante para combatir la pandemia.

Finalmente, el director general de Salud Pública del Principado de Asturias, Rafael Cofiño, ha descartado que el Gobierno asturiano solicite por el momento la colaboración de los 2.000 rastreadores del Ejército que el Ejecutivo central puso a disposición de las autonomías este martes y ha asegurado que, si bien Salud está «abierta» a «todo tipo de ideas», no tienen en mente solicitar esta ayuda por ahora.