Si echamos la vista atrás, a lo largo de la historia, podemos comprobar que el agua ha sido un símbolo de fertilidad. Además, las monedas están relacionadas con la buena suerte. Por eso, no es de extrañar que estos elementos de metal y las fuentes estén íntimamente relacionados. Ambas son protagonistas de un sinfín de profecías y supersticiones.
Un recipiente lleno de agua era el símbolo egipcio de la maternidad. También, para agradar a los dioses y los demonios, se ha usado el dinero desde hace milenios. Unidos, los dos elementos se consideran muy poderosos y es por eso que gente de todas las culturas siguen manteniendo las tradiciones de sus ancestros.
¿Te interesa esta curiosidad? Descubre los motivos por los que se echan monedas a las fuentes.
3Lanzamiento de objetos y monedas para agradar a los dioses
Entre dioses y deidades, el pueblo Celta fue uno de los primeros en usar objetos como símbolo de buena suerte en las fuentes. Por entonces, las monedas no eran comunes, pero sí las piedras. Por eso, fueron estos objetos los que se arrojaban en los pozos para ver cuántas burbujas producían o escuchar su sonido. Según el número, creían que tendrían más o menos suerte.
Así nació la costumbre de pedirles deseos a los dioses, que siempre estaban relacionados con la salud. Conforme pasaron los siglos, la tradición se afianzó. Además, se fue también modificando. Ya no solo se pedía buena salud, sino también trabajo, dinero, poder o encontrar pareja.
Con el tiempo, se cambió la costumbre de lanzar piedras por tirar monedas. El cambio fue por una razón sencilla: es más fácil que alguien llevara una moneda encima y no una piedra. En algunos lugares, otra de las tradiciones que floreció fue la de tirar alfileres a las fuentes.