El Boletín Oficial del Estado (BOE) ha publicado este miércoles el Real Decreto aprobado ayer en Consejo de Ministros que desarrolla la nueva estructura orgánica del Ministerio de Sanidad, con la creación, como principal novedad, de la Secretaría de Estado de Sanidad, que orgánicamente mantiene el mismo número de direcciones generales que la anterior Secretaría General de Sanidad.
Así, estará compuesto por la Dirección General de Salud Pública; Dirección General de Cartera Común de Servicios del SNS y Farmacia; Dirección General de Ordenación Profesional, y Delegación del Gobierno del Plan Nacional sobre Drogas. Al frente de estas direcciones generales continúan Pilar Aparicio, Patricia Lacruz, Rodrigo Gutiérrez y Azucena Martí, respectivamente.
Además, fija que la Secretaría General de Sanidad se transforma en la nueva Secretaría General de Salud Digital, Información e Innovación del Sistema Nacional de Salud (SNS), que asumirá competencias sobre aspectos clave de las políticas públicas sanitarias como los relativos a la innovación en el sistema y la industria sanitaria; la digitalización del Sistema Nacional de Salud; la gestión de la información sanitaria y los proyectos de innovación en el ámbito de la salud.
Entre otros objetivos, abordará los proyectos de modernización, mejora y transformación del Sistema Nacional de Salud (SNS) tras los retos derivados de la pandemia ocasionada por la COVID-19. En concreto, los relacionados con la salud digital, la interoperabilidad y los servicios en red en el ámbito nacional, europeo e internacional; así como los sistemas de información sanitarios.
De la Secretaría General dependerá una nueva unidad, la Dirección General de Salud Digital y Sistemas de Información para el Sistema Nacional de Salud. Esta dirección general será el órgano encargado del desarrollo de servicios públicos digitales, del impulso a la salud digital y a la interoperabilidad electrónica de la información clínica y sanitaria, tanto en el ámbito nacional como internacional. Se encargará, además, de la innovación en la analítica de datos y la explotación de la información relativa a la salud.
La publicación en el BOE también establece que el Instituto de Salud Carlos III, adscrito orgánicamente al Ministerio de Ciencia e Innovación, tendrá una doble dependencia funcional del Ministerio de Sanidad y del Ministerio de Ciencia e Innovación. Así, dependerá funcionalmente del Ministerio de Sanidad para la realización de aquellas actividades que desarrolle en materia de salud, de planificación y asistencia sanitaria; y, en coordinación con el Ministerio de Ciencia e Innovación, de aquellas otras de investigación aplicada cuando tengan traslación al Sistema Nacional de Salud. Para la realización del resto de actividades dependerá funcionalmente del Ministerio de Ciencia e Innovación a través de la Secretaría General de Investigación.
El Decreto fija que se han suprimido de la estructura orgánica del Ministerio de Sanidad la Subdirección General de Promoción de la Salud y Vigilancia en Salud Pública, la Subdirección General de Calidad Asistencial e Innovación, la Subdirección General de Información Sanitaria, la Subdirección General de Tecnologías de la Información y la Subdirección General de Normativa y Recursos.
Con esta nueva estructura, el Gobierno quiere reforzar el Ministerio de Sanidad para afrontar los retos presentes y futuros, entre ellos, los derivados de la pandemia de COVID-19. «El objetivo es preparar el Sistema Nacional de Salud para atender los grandes desafíos a los que se enfrenta, equiparables a los que tienen ante sí el conjunto de países avanzados. De ahí el fortalecimiento de las capacidades de dirección, coordinación, impulso y seguimiento en aspectos tan relevantes como las tecnologías sanitarias, el ‘e-Health’, la innovación o los sistemas de información sanitaria», resaltó este martes el Ejecutivo.