En pleno verano, seguro que tú también has notado todos los problemas que causan las mascarillas cuando hace tanto calor. En España, las temperaturas veraniegas pueden rondar los 38 grados e incluso superarlos. Por eso, es importante tener en cuenta que nuestra piel puede sufrir consecuencias si la usamos de forma muy prolongada, también en la oficina.
Una de las mayores preocupaciones cuando nos enteramos de que debíamos llevar este elemento para frenar el contagio por el virus, era la de cómo soportaríamos las altas temperaturas. Su uso, debemos recordar, es obligatorio en todos los espacios cerrados y cuando no se pueda mantener la distancia de dos metros en el exterior.
¿Qué consecuencias traerá su uso en nuestra piel? Descubre los problemas que dan las mascarillas con el calor.
3Cuidado con las mascarillas caseras
Con las mascarillas caseras, debemos tener cuidado. Si hace mucho calor, pueden producir dermatitis debido a sus colorantes, no homologados para el uso clínico. Las gomas interiores en la zona de la nariz también son importantes, pues pueden producir bastantes irritaciones y también alergias.
De hecho, en muchos casos el problema no es la mascarilla en sí, sino que contribuye a empeorar un problema que ya teníamos de forma previa en nuestra piel. Las patologías más habituales son la dermatitis rosácea, seborreica y el acné.
Todo esto se une a que, en general, nuestro estado de ánimo ha ido decayendo durante el confinamiento. Esto produce que se empeoren estas patologías sin poder evitarlo. En algunas personas, se pueden unir estos tres factores importantes: la oclusión producida por las mascarillas, la patología previa que tuvieran y el estrés derivado de la cuarentena.
