Vox ha homenajeado este miércoles a la Guardia Civil en un acto electoral que ha realizado en Oñati (Guipúzcoa), entre los abucheos e insultos de varios cientos de personas, donde el secretario general de la formación, Javier Ortega Smith, ha incidido en que han querido hacer un reconocimiento «a los que vivieron y murieron defendiendo la libertad» y a los que «resisten todos los días la presión y el insulto de los cobardes y de los miserables».
El mitin, en el que también ha intervenido la diputada de Vox en el Congreso Macarena Olona y la candidata por Guipúzcoa, María Pérez, se ha celebrado en el frontón municipal de la localidad guipuzcoana, tras obtener la autorización el pasado lunes de la Junta Electoral de Bergara para usar este espacio público con fines electorales, pese a la oposición del Ayuntamiento de la localidad, al haberse realizado la petición «fuera de plazo» y porque estaba programado un concierto en la zona.
Unas 300 personas, en su mayoría jóvenes, se han congregado en los alrededores del frontón donde ha tenido lugar el acto, zona que estaba acordonada por la Ertzaintza, que ha desplegado varias dotaciones para evitar incidentes.
Los congregados, que portaban pancartas reclamando la libertad de los jóvenes de Alsasua y con lemas como ‘Herriak ez ditu faxistak onartzen’ (El pueblo no acepta a los fascistas), han proferido insultos a los miembros de Vox y han coreado lemas a favor de los presos y la amnistía, entre otros.
En su intervención ante medio centenar de cargos y militantes, Ortega Smith ha calificado a la sociedad vasca de «enferma» porque la Guardia Civil «no ha tenido un solo homenaje, como no lo ha tenido el mejor de los nuestros, que en Mondragon fue enterrado vivo durante más de 500 días, José Antonio Ortega Lara», aunque «sí lo han hecho a jefes de ETA».
A su juicio, «no se ha derrotado realmente a ETA porque para derrotar a una organización terrorista no solo hay que derrotar a su brazo armado», sino también sus «objetivos políticos», que «siguen vivos en las instituciones, en el relato de la calle de las escuelas y con los homenajes a malditos terroristas».
Ortega Smith ha pedido al «pueblo vasco y español» que «despierte» porque tiene «una oportunidad de oro para llevar a las instituciones vascas la voz de valientes». En su opinión, solo hay dos opciones: «o estás con los que defendemos a las víctimas, o con los que siguen defendiendo a los terroristas o callando a las víctimas».
«O quienes creemos que al meter tu papeleta estás abriendo las instituciones a la democracia, o quienes siguen aceptando el totalitarismo que desde hace 40 años con su clientelismo corrupto impone el PNV. El 12 de julio comienza la esperanza para estas tierras», ha manifestado.
«SIN MIEDO»
Por su parte, Macarena Olona se ha dirigido a los «cachorros de ETA» para decirles que los miembros de Vox no les tienen «miedo». «Venimos a reclamar nuestra tierra porque la libertad se defiende», ha afirmado, al tiempo que ha recordado que «ocho agentes de la Guardia Civil han derramado su sangre» en Oñati, y ha denunciado «la permisividad de los gobiernos de España de uno y otro color, que han ido haciendo concesiones al mal llamado nacionalismo y han puesto de rodillas a España».
Olona ha pedido la dimisión del Gobierno de PSOE y Unidas Podemos y, en especial, del «indigno» ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, que «ha abandonado a sus hombres, ha traicionado todos los principios como magistrado, ha abandonado la lucha contra ETA y ha derogado la política penitenciaria de dispersión, traicionando a las víctimas y a su memoria.
Los dirigentes y militantes de Vox, pasadas las 20.30 horas, han abandonado Oñati escoltados por la Ertzaintza, momento en que se han producido algunos episodios de tensión entre los radicales y antifascistas, y la Policía vasca.
