Seguro que lo has visto en las redes sociales, sobre todo entre los famosos. Y es gracias a la aplicación FaceApp, que permite saber cómo serás de anciano o cómo serías si cambiaras tu género. Nos hemos reído mucho viendo el resultado, ahora bien, si supieras algunas de las consecuencias que tiene usarlo, seguro que no estarías tan contento.
Este programa ruso para móvil, que envejece rostros y cambia de sexo, genera dudas sobre si respeta el derecho a la imagen y la privacidad. Ya hizo furor hace 3 años en 2017, y luego de nuevo el año pasado. Pero precisamente ya vimos los peligros que conlleva el uso de la aplicación. Aunque muchas personas, sobre todo los famosos, no son conscientes de lo que esto supone. Twitter, Facebook o Instagram se llenen de selfies de famosos y anónimos caracterizados como ancianos o como los políticos cambiando su sexo.
Qué es FaceApp
Vas a conocer un poco más sobre este programa para los móviles que ha revolucionado las redes en las últimas semanas. FaceApp es una aplicación móvil para iOS y Android desarrollada por la empresa rusa Wireless Lab. Pues bien utiliza inteligencia artificial para generar automáticamente transformaciones de rostros altamente realistas en las fotografías.
Existen múltiples opciones para manipular la foto cargada, como las opciones del editor de agregar una impresión, maquillaje, sonrisas, colores de cabello, peinados, anteojos, edad o barbas. Los filtros, el desenfoque de la lente y los fondos junto con las superposiciones, los tatuajes y las viñetas también forman parte de la aplicación.
Las críticas
FaceApp recibió numerosas críticas tanto en la prensa como en las redes sociales por la privacidad de los datos del usuarios. Entre las preocupaciones planteadas están las acusaciones de que almacena las fotos de los usuarios en sus servidores, y que sus términos de uso les permitían usar las imágenes y fotos de los usuarios con fines comerciales.
Sin embargo, el fundador de la compañía, Yaroslav Goncharov, declaró que los datos de los usuarios y las imágenes cargadas no se transferían a Rusia, sino que se procesaban en servidores que se ejecutaban en Google Cloud Platform y Amazon Web Services.
Compartir tus datos
La aplicación funciona con unos algoritmos que no se instalan junto al resto de ‘assets’ cuando bajas e instalas la app. No los tienes en el móvil, por lo que todas y cada una de las imágenes procesadas en la app deben subirse al servidor de FaceApp para ser procesadas.
Es decir que una copia de tu foto es enviada al equipo de FaceApp, y, como señala su Política, puede ser compartida con un montón de empresas subsidiarias o Third Parties. Por lo tanto estás indefenso porque al bajarlo has dado el consetimiento para que hagan estas cosas.
Falsificar tu identidad
Y claro, el que se difunda tu foto por ahí tiene sus problemas. Al utilizar Inteligencia Artificial para realizar las modificaciones del reconocimiento facial, el propietario de la empresa podría vender estas fotos a otras empresas
Y de esta manera, estos datos pueden ser utilizados fácilmente por ciberdelincuentes para falsificar nuestra identidad. ¿Te imaginas que falsifican una documentación gracias a tu foto? Pues bien, esto se puede producir y estarías metido en un buen lío. Se debe tener cuidado al decidir compartirlos y pensar en los riesgos.
La letra pequeña de Faceapp
Hay que reconocer que son muy pocos los usuarios que se leen la letra pequeña cuando se instalan una aplicación. Ahí es donde suelen ir los términos y te dice la empresa desarrolladora acceder a la información personal del cliente. Algo que los expone a riesgos no previstos y que en ocasiones puedes ser peligroso.
Los expertos en ciberseguridad nos cuentan lo que hace FaceApp con los datos biométricos obtenidos y a quién le entrega la información. En el apartado tercero del contrato los usuarios aceptan que sus datos biométricos sean entregados a terceras partes. Y es ahí donde comienza el peligro, porque al donarlos a terceros, nunca sabes dónde puede acabar tu foto y los datos.
Una licencia para toda la vida
Te tiene que quedar claro que cuando publicas o compartes contenido de usuario en nuestros servicios, cualquier información asociada como el nombre de usuario, ubicación o foto de perfil serán visibles al público.
Y mucho ojo porque esto es como los antecedentes. Te pueden perseguir de por vida. Es que la propia empresa de Faceapp no te dice lo que sucedería si fuera disuelta o vendida. Así como tampoco si puede ser trasladada la dirección fiscal de la misma para atenerse a otra regulación más permisiva con los datos recopilados. Así que tienes que tener mucho ojo cuando te descargas este o cualquier tipo de aplicaciones parecidas.
Datos que recopila Faceapp
Los términos de servicio de la aplicación, esos que nadie nos leemos, son parecidos a los de cualquier otra app. En este cao nos dice que puede recopilar «contenido del usuario (por ejemplo, fotos y otros materiales) que publica a través del servicio».
Pero ojo porque FaceApp también realiza un monitoreo de la actividad del usuario. Incluidas las páginas web que visita y su ubicación, y recopila «metadatos» sobre cómo interactúa el usuario con el servicio. Ya sabes las famosas cookies que luego se quedan fijadas y aprovecha para intentar persuadirte de cosas. Aunque en su aviso de privacidad se aclara que «no alquilaremos ni venderemos su información a terceros». Pero ya se sabe que el dicho al hecho…
Otras polémicas
No es la primera vez que Facepp se ve salpicada por la polémica. En otra ocasión se enfrentó a las críticas cuando presentó «filtros de etnia» que representan «Blanco», «Negro», «Asiático» e «Indio». Los filtros se eliminaron inmediatamente de la aplicación.
Así pues ahora que conoces un poco más cómo es la manera de actuar de esta aplicación, tienes que pensarte dos veces sí te las descargas y ofreces todos los datos personales. Sabemos que es muy goloso y divertido el poder transformar a toda tu familia, pero ya has visto que hay motivos por los que jamás deberías utilizarla.