Con el verano encima parece que llegamos un poco tarde al tema de las dietas ¿no? Pues no, nunca es tarde si la dicha es buena. Y es cierto que si vamos a empezar ahora nuestro tipo no será el ideal, pero que algo mejor estaremos también. Lo que es ideal es que demos con la dieta ideal, esa que va con nuestra forma de ser – y comer – para que no nos cueste la vida y consigamos ser constantes. ¿Has oído hablar de la dieta flexible? Si eres de los que no puede prescindir de la carne, esta es tu dieta. Te contamos a continuación en qué consiste.
1¿Qué es la dieta flexible?
El adjetivo flexible es el que define esta dieta precisamente porque es un régimen en el que no se dan las restricciones innecesarias. Es decir, la dieta flexible consiste en aplicar lo que nos dice la ciencia actualmente sobre nutrición y darle al cuerpo los nutrientes necesarios, sin obsesiones ni pasar hambre. En esta dieta no existen alimentos que debas comer por obligación. Tan sólo deberás sustituir los que no te gustan por otros que te gusten y te aporten la misma energía, vitamina o minerales. Así de sencillo.