En el programa ‘El Chiringuito de Jugones’ trae siempre las mejores «jugadas». Y es que, desde que comenzara su andadura en el 2014, la línea de este espacio televisivo pretendía ser un momento de análisis y comentarios sobre toda la información deportiva y, en concreto, del fútbol español. Y así es. La actualidad de todo lo que acontece en los principales equipos de la Liga Española como el Real Madrid o el F.C Barcelona son tratados en debate por el director del programa, Josep Pedregol y los ocho tertulianos que le acompañan.
Sin embargo, la vuelta de tuerca que caracteriza a ‘El Chiringuito’ es la de no centrarse en el debate acerca de la exclusiva información deportiva, sino la de acercarse a los momentos más controvertidos, surrealistas y melodramáticos, quizás, más parecidos a los de un programa de telerrealidad. Un espacio en el que se han vivido, y se viven momentos de mucha vergüenza ajena por protagonizarse episodios en los que han habido agresiones físicas, abandonos de plató en directo, ataques personales e, incluso, ataques de ansiedad en directo. O sea, podría decirse que nos encontramos frente al «Sálvame del deporte«. Y aquí os dejamos tan solo con algunos de esos momentos.
3El «me voy del plató y no vuelvo» de José Pedregol
En el 2017 ocurrió un capítulo bastante desconcertante. En ese momento futbolístico, el Real Madrid acababa de perder la Copa del Rey frente al Celta de Vigo, estaba previsto comentar y debatir acerca de ello. Pues, efectivamente, se quedó en una previsión, ya que lo que no esperaban los allí presentes es que el moderador del programa se levantara para no volver. Estas fueron sus palabras: “El Madrid hoy ha fracasado. Eso es una realidad. Tenemos que analizar muchas cosas más. Y sobre todo, ¿ahora qué? ¿Qué va a pasar con el Madrid hoy? ¿Dónde están aquellos que van a utilizar la derrota para machacar al club?”, dijo a las cámaras.
Al parecer, el presentador se enfadó porque hubo un problema técnico con las imágenes que se mostraban en una de las pantallas. Todo un alboroto que terminó en un “Analizarlo vosotros, yo me voy. Yo hasta mañana. Os quedáis con ellos, ¿vale?» o como se dice de forma más coloquial ¡Hasta luego, Mari Carmen!