«Que la comida sea tu medicina, y la medicina sea tu comida». Con estas palabras, el antiguo médico griego Hipócrates, a menudo llamado el padre de la medicina occidental, recetaba ajo en la antigüedad para tratar una variedad de afecciones médicas. Y lo cierto es que la ciencia en nuestros días ha confirmado muchos de esos beneficios del ajo para nuestra salud.
La ciencia moderna ha confirmado recientemente muchos de estos efectos beneficiosos para la salud, de hecho, existe un estudio muy completo sobre los usos del ajo y sus beneficios en la antigüedad publicado por The Journal of Nutrition, del cual se desprende que el jo en la antigüedad es uno de los primeros ejemplos documentados de plantas empleadas para el tratamiento de enfermedades y el mantenimiento de la salud.
4Reduce los niveles de colesterol y la presión arterial
Las enfermedades cardiovasculares como los ataques cardíacos y los derrames cerebrales son los principales asesinos del mundo. Y la presión arterial alta, o la hipertensión, es uno de los impulsores más importantes de estas enfermedades.
Así, el estudio citado anteriormente sobre el ajo deduce que sus suplementos tienen un impacto significativo en la reducción de la presión arterial en personas con presión arterial alta. Asimismo, reducen el colesterol total y el LDL (o el denominado colesterol malo) y los triglicéridos no parecen verse afectados.