La siesta, el nombre que recibe el sueño después de comer, puede ser muy beneficiosa para la salud, tal y como han demostrado los diferentes estudios que se han llevado a cabo desde hace años. Sin embargo, siempre ha existido cierto debate acerca de su duración perfecta.
El descanso a media tarde puede variar su duración en función de los beneficios que se desee conseguir, si bien lo más recomendable es que no dure más de 20 minutos. A continuación te explicamos las razones que así lo demuestran.
1LA DURACIÓN DE LA SIESTA
Aunque existen diferentes teorías acerca de la duración de la siesta perfecta, la más extendida es la de indicar que esta no debe superar los 20 minutos.
Esta es la duración recomendada, ya que se considera que entre 10 y 20 minutos es el descanso justo para poder generar en el organismo el impulso de energía que se requiere para poder afrontar lo que resta de día en las mejores condiciones posibles.
De esta manera, tras haber madrugado y realizado las tareas correspondientes por la mañana, una pequeña siesta de hasta 20 minutos te servirá para reponer fuerzas y continuar con la actividad vespertina, sin sufrir el cansancio y siendo muy reparadora.
Además, para buscar una siesta que sea poco profunda es preferible evitar acostarse, sino que se debe adoptar una postura ligeramente erguida.
