La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha advertido en repetidas ocasiones que el coronavirus es un enemigo que puede quedarse entre nosotros un largo periodo de tiempo. Pero hay voces de algunos expertos que opinan que la pandemia desaparecerá de golpe, al igual que lo hicieron virus similares a este, como los responsables de la pandemia del SARS en 2003 o la del MERS en 2012. El neumólogo Alexánder Chuchalin, que asesora al Gobierno de Rusia durante la crisis del coronavirus, o los asesores de la Casa Blanca, en Estados Unidos, son algunos de los que están convencidos de que esta pandemia desaparecerá este año y no volverá a reaparecer hasta dentro de bastante tiempo. Llegan incluso a descartar la idea extendida del rebrote en otoño. Pero lo único que está claro es que ningún experto se pone de acuerdo.
El director de Emergencias Sanitarias en la OMS, Mike Ryan ha advertido que el coronavirus puede quedarse entre nosotros, como el sida. «Es importante poner esto encima de la mesa. Puede convertirse en otro virus endémico en nuestras comunidades y este virus pueden no irse nunca. Creo que es importante que seamos realistas y no creo que nadie pueda predecir cuándo desaparecerá esta enfermedad. Creo que no hay promesas en esto y no hay fechas. Esta enfermedad puede convertirse en un problema largo o puede no serlo».
«Si recordamos lo que pasó en 2002, la epidemia duró tres meses y medio. En 2012 fue casi cuatro meses. Es decir, la actual pandemia debería extenderse entre tres meses y medio hasta cuatro meses. Esto empezó a mediados de febrero así que hacia junio tendremos que ver una normalización», aseguró Chuchalin en una entrevista concedida al diario ABC. «La ciencia tendrá que determinar muchas cosas todavía acerca de esto, pero no será anual, sino cada 9-10 años. Mire, la primera surgió en 2002, la segunda en 2012 y la de ahora, en 2020. Pienso que no volverá nada parecido hasta dentro de una década», continuó al final de la entrevista.
Juan Emilio Losa, jefe enfermedades infecciosas del Hospital Fundación Alcorcón, asegura que la mayoría de los coronavirus similares al actual que han permanecido presentes entre la población suelen estar circunscritos a un área geográfica concreta. Y no suele ser excesivamente amplia, como es el caso de esta pandemia que se ha extendido por todo el planeta, sin excepciones.
«Dicen que se irá. Eso no significa este año, no significa que se irá, francamente, para el otoño o después del otoño, pero, finalmente desaparecerá”, y agregó, que sin embargo “si tuviéramos una vacuna, eso sería muy últil”, aseguró el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en base al criterio de los expertos que le habían asesorado.
Toda una maraña de opiniones que, por supuesto, tienen su contrapeso entre aquellos que advierten que no hay que bajar la guardia y que hay que prepararse para un posible rebrote, ya sea a finales de junio, como auguran algunos, o en otoño. Pero en cualquier caso, el hecho de estar preparados es una obligación para cualquier Gobierno, desaparezca el virus o no.
El presidente de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas, Jordi Vila, también se ha mojado y ha dado sus previsiones. En declaraciones a TV3, aseguró que «el Covid-19 desaparecerá y volverá a aparecer», tal y como hace la gripe cada año en verano. Y es por eso que hay que mantener preparados los hospitales para poder responder de forma eficiente a un posible rebrote del virus.
Lo que los expertos ponen en común es que la incidencia del coronavirus será intermitente. Se apagará y se encenderá como un interruptor. La duda para muchos es bajo qué periodo de tiempo lo hará. La gripe aparece y desaparece cada año. Con las temperaturas altas se desvanece, pero cuando llega el invierno suele haber todos los años un gran número de infectados por este virus ya muy conocido. Los más optimistas estiman que el coronavirus puede tener una intermitencia de décadas, pero lo que está claro es que nadie tiene certeza de nada, solo elucubraciones.
El militar científico israelí Isaac Ben-Israel también es de los que piensan que el coronavirus desparecerá de golpe. Su estudio dio con dos conclusiones. La primera es que el crecimiento del número de infectados no es ni mucho menos exponencial, sino que aumenta a un ritmo constante y estable. Y la segunda es que a los 70 días de que se inicie la pandemia, el coronavirus remite casi del todo.