España es uno de los países donde más nos medicamos no sólo para el cuerpo sino para la mente. Los países occidentales tienen unas tasas preocupantes de trastornos psicológicos y eso deriva en una enorme eso de fármacos para mitigarlos. El Trankimazin es sin duda el rey de los ansiolíticos y somníferos. Perteneciente al grupo de las benzodiacepinas, su gran aceptación deriva en los pocos efectos secundarios que presenta, frente a los altísimos que tenían los antiguos barbitúricos. Sin embargo, su uso excesivo también provoca efectos adversos. Por eso te vamos a indicar por qué no debes abusar del Trankimazin.
5Malos antecedentes
Aunque sólo sea por los malos antecedentes y pésimos datos que se dan en España, es motivación suficiente para no engrosar las estadísticas. Porque nuestro país lidera el abuso o el uso imprudente del Trankimazin y el Orfidal en Europa, según una encuesta a 22.000 personas en cinco países europeos. El 18% de los encuestados aquí habían consumido al margen del médico. España también lidera el consumo inapropiado de sedantes como el lorazepam (Orfidal), el diazepam (Valium) y el bromazepam (Lexatin).