Cada vez que interviene Pedro Sánchez se analiza con lupa no sólo lo que dice, sino cómo lo dice. El presidente del Gobierno está recibiendo muchas críticas a su gestión de la crisis por la pandemia de coronavirus, pero también a su forma de comunicar y dirigirse al país en un momento tan delicado. Discursos extremadamente belicistas o infantiles a veces, en los que no ha conseguido transmitir cercanía, ni empatía por un pueblo que está atravesando sus horas más bajas. La historia, está llena de grandes discursos de otros presidentes o personas que trascendieron por lo que dijeron en un momento histórico, y por cómo lo dijeron.
5«Estos muertos no habrán dado su muerte en vano»
Tuvo lugar tras la cruenta batalla de Gettysburg. Fue un discurso breve, sustancial, de apenas 300 palabras, pero donde se mencionaban todos los problemas que en aquellos momentos le importaban a una sociedad mermada por la guerra. Lincoln le dio a la población un hilo de esperanza al que aferrarse, un sentido histórico a la lucha en la que estaban sumidos. Lincoln es otro político con cualidades potentes para la oratoria y para afrontar el momento histórico que le tocó vivir. Sin ninguna duda, otro gran ejemplo en el que podría inspirarse Pedro Sánchez.