Vox inaugura este sábado su sede en Barcelona bajo la amenaza de un escrache para impedir celebrar la apertura de la misma. La organización “Plataforma Antifascista” ha convocado a las once y media de la mañana un manifestación para “no permitir la apertura de la sede de Vox en Barcelona”, programada para las doce del mediodía.
Bajo el lema “que le jodan a Vox”, los manifestantes pretenden impedir que tenga lugar el acto previsto en el número 28 de carrer del Camp, en el distrito de Sarrià, y que contará con la intervención del secretario general de la formación, Javier Ortega Smith, el portavoz adjunto del grupo Vox en el Congreso de los Diputados, Ignacio Garriga, el presidente de Vox Barcelona, Juan Garriga, y el vicesecretario nacional de jóvenes, Luis Felipe Ulecia.
La amenaza de este escrache llega en la que ha sido una semana agitada para Vox por la cancelación de su cuenta de Twitter por, supuestamente, infringir sus normas de uso y por las declaraciones del periodista Jordi Évole en el programa El Hormiguero de Antena 3 en las que afirmó que el líder de la formación, Santiago Abascal, se merecía “un buen hostión”.
CANCELACIÓN CUENTA DE TWITTER
El episodio de Twitter se desencadenó por la respuesta que el partido escribió a un tuit de la Vicesecretaria General del PSOE, Adriana Lastra, en el que decía que el partido tenía “ideas retrógradas” y que llaman “libertad” lo que, a su juicio, es “odio”.
Ante estas afirmaciones el equipo de comunicación del partido decidió contestar a la socialista con otra publicación en la que apuntaba a que Vox no iba a permitir que el Gobierno empleara dinero público para “promover la pederastia”.
Una publicación que llevó a la red social del pájaro a bloquear su cuenta por “conductas de incitación al odio”, ante la indignación del partido que se preguntó hacia qué persona o colectivo habían hecho manifestaciones de incitación al odio.
Después de este episodio, el portavoz de Vox en el Congreso, Iván Espinosa de los Monteros, anunció que su partido denunciará ante los tribunales de España y Estados Unidos el bloqueo de su cuenta de Twitter al considerar que sufre un “claro caso” de discriminación por motivos ideológicos por parte de la red social.
ÉVOLE INCITA A LA VIOLENCIA
Lo que sí consideraron una conducta de incitación a la violencia fueron las declaraciones de Évole en el grupo Atresmedia en las que afirmó, entre risas y con el beneplácito de su entrevistador Pablo Motos, que Abascal merecía recibir “un buen hostión”.
Unas manifestaciones que se han hecho virales en la red después de que los simpatizantes de Vox decidieran compartirlas para condenar lo que aseguran es incitación a la violencia desde un espacio televisivo y bajo el hastag #AtresmediaCensura.
El propio Abascal se preguntaba en Twitter “¿Cuántos titulares ocuparían estas declaraciones si las hubiese hecho un miembro de VOX?”. Atresmedia ha confirmado que no ha censurado vídeo alguno, y que el contenido multimedia ha desaparecido por cuestiones de copyright.
