Faltan poco menos de dos meses para que dé inicio una nueva edición del Mobile World Congress de Barcelona y la tensión se palpa entre los principales protagonistas de la feria. Por un lado las empresas participantes en el evento, que son la esencia del mismo; pero también los hoteleros, encargados de hospedar a los miles de asistentes que recibe el congreso.
Según ha podido conocer MONCLOA.com, diversas compañías estarían postergando sus operativas logísticas para esos días ante la incertidumbre que se mantiene viva desde que fuese pública la condena a los políticos presos catalanes.
Es decir, la celebración del evento es innegable. Bajo ningún escenario la GSMA, patronal tecnológica que organiza el evento, tiene previsto la no realización del Mobile. Pero eso no exime para que muchas empresas, sobre todo en privado, recelen sobre la situación. De este modo, asumen que durante la última semana de febrero en la que se celebra el MWC habrá movimiento en las calles debido a la importancia del evento y su exposición internacional.
Un ejemplo de esta incertidumbre es que algunas empresas, habituales asistentes al Mobile, están retardando sus reversas hoteleras para clientes y partners con el objetivo de encontrar ubicaciones que estén fuera de cualquier conflicto social o protesta que pueda haber en las calles. En muchos casos quieren aislar a sus representantes de las posibles protestas que concurren históricamente, bien es cierto, alrededor de una de las mayores ferias de movilidad del mundo.
MWC SÍ O SÍ, PERO CON DUDAS
El Mobile World Congress tiene contrato de celebración en vigor hasta 2023. Y pese a que los últimos años ha estado rodeado de la polémica sobre una ruptura del mismo para llevarse la feria a otro lugar, lo cierto es que, un año más, esa circunstancia ya no es posible.
Decenas de empresas llevan semanas trabajando en la preparación del MWC, con mucho dinero invertido, conviene recordar que los espacios en la feria se pagan muy caros, y dar marcha atrás a todo eso, a estas alturas, es insostenible.
No obstante, según ha conocido MONCLOA.com en fuentes hoteleras, es cierto que este año se están postergando las reservas más que otros años. El sector lo adjudica al clima político que se vive en Cataluña en esos momentos y, sobre todo, a los sucesos que se dieron tras la sentencia del “procés”. Así, pese a que los hosteleros no estiman que pueda reproducirse la situación, la realidad es que de momento el ritmo es manifiestamente lento.
OPTIMISMO MODERADO
En conversaciones con empresas que estarán presentes en la próxima edición del MWC, éstas muestran cierto optimismo sobre lo que será la marcha del evento. Incluso, dando por sentado que habrá cierto revuelo sobre la presencia del rey Felipe VI, si finalmente acude a la feria, nadie muestra una preocupación excesiva.
Y es que el MWC siempre se ha visto envuelto en polémicas y reivindicaciones de todo tipo. La tipología del evento, con gran proyección nacional e internacional, es un gran escaparate para mostrar los lamentos sectoriales. Eso hace que muchas empresas estén habituadas a dar explicaciones sobre la falta de transporte o las manifestaciones a las puertas de la feria.
La única diferencia es que ahora hay un matiz político que puede movilizar a más parte de la sociedad. Y, precisamente este extremo, es el que crea cierta incertidumbre entre las empresas. Aunque su tardan mucho se quedarán si hoteles… y eso será peor.