Un acusado en el caso Astapa ha presentado alegaciones contra la pretensión de la Fiscalía de no investigar, previamente al juicio oral, el papel que el comisario Villarejo jugó en esta operación. En opinión de la defensa de Luis Fernando Linares, es necesario que, al menos, se incorpore toda la información descubierta en el sumario del caso Tándem, que investiga en la Audiencia Nacional las actividades de Villarejo. De esta manera se debería “investigar la posible falsedad de las denuncias e informes iniciales” del caso Astapa.
La Fiscalía se ha opuesto a esta posibilidad. En todo caso, sólo aceptaba que las defensas incorporaran lo que estimaran pertinente en los escritos de conclusiones provisionales. La instrucción judicial del caso Astapa ya ha finalizado y se encuentra a la espera de que se fije la fecha de la celebración del juicio oral. Tras este cierre de la investigación, que ha durado una década, varios acusados pidieron realizar nuevas pruebas tras la detención del comisario Villarejo.
En este sentido tuvo especial relevancia un informe de la Unidad de Asuntos Internos de la Policía en el que analizaba los intereses y relaciones del comisario Villarejo con Estepona y alguno de los protagonistas del caso Astapa. A la vista del mismo, la Fiscalía defendió en un primer momento, en el mes de febrero del año pasado, que las partes tuvieran acceso a los nuevos documentos que iban saliendo a la luz. Esto era necesario, dijo el fiscal, “a fin de evitar cualquier posible indefensión”, y para que las defensas pudieran pedir más documentos o pruebas.
Ahora, sin embargo, la Fiscalía limita estas posibilidades, por lo que la defensa de Luis Fernando Linares alerta de que, caso de aceptar esta nueva tesis, los acusados ya no podrían proponer pruebas obtenidas a la vista de la nueva información que debería provenir de la investigación del caso Tándem, que se sigue en la Audiencia Nacional.
Además, la representación de Linares considera que las noticias que se han publicado sobre el papel que jugó el comisario Villarejo en el caso Astapa hacen necesario que, además de contar con la totalidad de lo investigado en la Audiencia Nacional, se llame a declarar a los implicados en las actuaciones de Villarejo en Estepona.
En ese sentido, el escrito de alegaciones señala que “el derecho de defensa de las partes no puede quedar fiado a la habilidad periodística para obtener filtraciones de unas diligencias previas reservadas e inaccesibles”. Además, estima que los acusados no pueden basar sus estrategias procesales en las noticias en prensa. “Lo que procede en un procedimiento penal es recabar testimonio del Juzgado de Instrucción correspondiente”, señala el escrito. En definitiva, defiende que hay que solicitar la información que se encuentra en poder del juez de la Audiencia Nacional, Manuel García Castellón.
LA INFLUENCIA DE VILLAREJO EN EL CASO ASTAPA
La defensa de Luis Fernando Linares considera que de seguirse el último criterio expresado por la Fiscalía, provocaría “indefensión a las partes”, tal como el propio Ministerio Público había señalado antes de cambiar de criterio. Esto es así, según argumenta, porque “no puede aventurarse en este momento, sin un solo informe, ni una sola página de la instrucción contra el ex comisario Villarejo, el alcance de las diligencias necesarias para aclarar y precisar la intervención e influencia” que pudo haber tenido en el inicio del caso Astapa.
El escrito de alegaciones defiende la importancia de las informaciones publicadas sobre el papel del comisario Villarejo en el caso Astapa. El fiscal, por el contrario, considera que una cosa es que el comisario pudiera haber usado de forma irregular información oficial a la que accedió por su cargo en la policía, pero estima que “otra muy distinta” es sostener que el caso Astapa arrancara con una denuncia falsa presentada por dos concejales que eran manipulados por el comisario y que la investigación estuviera controlada por él para favorecer sus inversiones e intereses particulares en Estepona.
Sin embargo, la defensa de Linares sostiene que este pronunciamiento de la Fiscalía sólo se puede basar en el acceso a documentos que no disponen las partes del procedimiento, o en las informaciones periodísticas. Por esta razón sostiene que “la solución pasa ineludiblemente por recabar las verdaderas fuentes de la información, los autos judiciales”.
El informe del fiscal analiza alguna de las operaciones urbanísticas en las que está implicado Villarejo en Estepona, como es el caso de la promoción El Mirador de la Cala. Sin embargo, aunque cree que debería realizarse una investigación, no cree que tenga relación con el caso Astapa.
Por el contrario, a la defensa de Linares le parece que las informaciones, publicadas por MONCLOA.COM junto con Elconfidencial.com, constatan que Villarejo tenía intereses urbanísticos en Estepona, que intervino en el caso Astapa, para el que realizó “trabajos de inteligencia” y que hay indicios de que pudo haber captado a los denunciantes del caso.
El escrito recuerda igualmente que Villarejo asesoró a imputados ante sus declaraciones en la sede de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía, en Madrid. También llama la atención sobre el hecho de que el agente que firmó los informes iniciales del caso es el que Villarejo “utilizaba cuando tenían intereses o clientes afectados por una instrucción”, como en los casos Pujol o Bárcenas, entre otros.
Las alegaciones recuerdan el papel del socio de Villarejo, Juan Carlos Escribano, que fue detenido en la operación Tándem. Este también fue el que realizó una declaración clave en la génesis del caso Astapa. Esta pudo ser preparada con Villarejo, según lo que el propio comisario dice en una de las grabaciones que publicó este periódico.
También recuerda el escrito de la defensa de Linares que el que fuera nombrado nuevo gerente de Urbanismo de Estepona, Diego de Lucas, fue luego socio de Villarejo. Según se puede comprobar en las grabaciones publicadas por MONCLOA.COM, el comisario trató con él sobre numerosas operaciones urbanísticas en Estepona, donde el policía realizaba negocios directamente o como intermediario. Además, alguno de los empresarios con los que hizo negocios fueron protegidos por Villarejo, según destacan las alegaciones. Por último, señala cómo filtró información que estaba bajo secreto del sumario a alguno de los investigados.