El PP vuelve a presionar a Ciudadanos tras su debacle para unirse a España Suma

  • El PP lamenta que los resultados serían diferentes si se hubieran presentado como España Suma.
  • Ciudadanos, de momento, ha vuelto a declinar la oferta.
  • Los populares esperan que en las autonómicas del País Vasco se consume la alianza.
  • No se rinden. Los populares no tiran la toalla y han vuelto a expresar su intención de unirse a Ciudadanos en un futuro no muy lejano. Los de Pablo Casado insisten en que la unión de ambas fuerzas convierte en útil el voto del centro-derecha. O lo que es lo mismo, la alianza se traducirá en más escaños. Tras la debacle del 10-N de la formación naranja, el PP ha vuelto a tenderle la mano que le llevan ofreciendo meses. La diferencia es que ahora el peso de los naranjas no es el mismo que después de abril. 

    El PP ha reforzado su ofensiva contra Ciudadanos para hacerles cambiar de opinión. Fuentes populares aseguran que la única salida del partido es “ir en coalición con el PP en España Suma”. Los populares lamentan que esta unión no se haya producido antes de las elecciones, porque la situación habría sido muy diferente. “En vez de juntar 99 entre PP y Ciudadanos tendríamos 115/120 y podríamos sumar”, sostienen. 

    Tras el recuento de votos este 10-N, Ciudadanos ha tenido solo 10 escaños, de los 57 de abril, mientras que en el Senado no han logrado ningún parlamentario, perdiendo los dos que consiguieron tras el 28-A. Sin embargo, la formación naranja sí que contará con 9 senadores gracias a la designación autonómica, donde han conseguido 8, y uno por la coalición de Navarra Suma. Estas cifras, no obstante, distan mucho de las que han obtenido los populares.

    Los de Casado han aumentado su presencia en ambas Cámaras y en las dos podrían haber obtenido más representación de ir de la mano de la formación naranja. Tener el mayor número de escaños en el Senado es una de las premisas tanto de PP como de Cs, ya que en esa Cámara es donde se pueden ejecutar artículos que tanto defienden como el 155. Y para sacarlo adelante necesitan mayorías sólidas. Algo que no ocurre con el arco actual.

    EL “NO” DE CIUDADANOS

    Los populares insisten, mientras que Ciudadanos se echa un paso atrás. Inés Arrimadas, portavoz en el Congreso y posible sucesora de Albert Rivera, ha descartado de momento este acercamiento. A miembros del PP no les extraña esta respuesta, que han mantenido siempre, y sopesan que “la fusión no la harán de principio”, pero sí ven con más probabilidades de ejecución una coalición. 

    La formación naranja tendrá que replantearse estos aspectos de su futuro en los próximos meses. Un tiempo en el que buscarán la forma salir a flote e impulsar su proyecto, tras este batacazo en las urnas. La posibilidad de que se formalice España Suma dependerá del giro que adopte el partido, aunque hay algunos miembros a los que no disgusta la idea

    De momento, no está previsto que Ciudadanos tome decisiones trascendentales, dado que no tendrán un nuevo líder hasta dentro de cuatro meses. El partido ha anunciado que deja las riendas de toda la gestión en manos de una gestora. Por otro lado, será uno de los fundadores de Cs, Manuel Bofill, quien asumirá la función de ser el regente hasta que se decida a un presidente (o presidenta) en el Congreso Extraordinario que aún no tiene fecha. 

    PAÍS VASCO SUMA, ENCIMA DE LA MESA

    En caso de que haya unas terceras elecciones —una opción que a priori estaría descartada por el preacuerdo entre PSOE y Unidas Podemos— ya no habría más alternativas para lanzar España Suma. Las miradas están puestas ahora en las próximas autonómicas del País Vasco y, a más largo plazo, las de Cataluña. El PP vuelve a reiterar esta fórmula para coger fuerza en una comunidad en la que el porcentaje de voto al centro-derecha ha bajado en los últimos años.

    La solución para remontar esta marca puede ser de nuevo la coalición de PP y Cs en una alianza, que podría llamarme País Vasco Suma. Esta unión permitiría aglutinar el voto de la derecha en una única candidatura, maximizando la representación autonómica. Este mismo sistema ya se puso en marcha en otras comunidades difíciles como en Navarra. Allí PP, Ciudadanos y UPN unieron fuerzas y consiguieron ganar las elecciones, quedándose muy próximos a la mayoría absoluta. 

    Este precedente, y dada la debilidad que presenta ahora Ciudadanos, podría ser el salvavidas para el partido. Y algo semejante sucede en Cataluña. Los populares de la región, encabezados por la portavoz Cayetana Álvarez de Toledo, han pedido en varias ocasiones que se efectúe esta alianza. Sin embargo, en este territorio, donde la formación naranja tiene un fuerte arraigo, es más improbable que suceda la unión por el momento. 

    El PP tiene pocos apoyos, mientras que Ciudadanos se ha proclamado vencedor de las últimas elecciones. Aunque este 10-N también se ha notado la bajada de apoyos en esta comunidad. Actualmente fuentes populares aseguran que no se ha empezado a mover nada relacionado con estas coaliciones. Y tampoco tienen mucho margen de actuación, ya que las elecciones en el País Vasco serán, si no hay adelanto, en septiembre de 2020