El síndrome de las dimisiones se instala en Ciudadanos

  • El exdiputado Juan Carlos Girauta ha seguido los pasos de Rivera.
  • Inés Arrimadas suena como la principal candidata para asumir la presidencia.
  • De momento no hay fecha oficial del Congreso Extraordinario para elegir líder.
  • Ciudadanos se enfrenta a su peor crisis desde que llegara al poder en 2015. Los malos resultados de este 10-N, donde solo consiguieron 10 escaños, han incentivado una sucesión de bajas, que se han cobrado, en primer lugar, al propio presidente. Albert Rivera no tardó en asumir la debacle electoral y se despidió definitivamente de la política este lunes. La salida del catalán ha asentado un malestar generalizado que ha continuado con otra dimisión, la del exdiputado Juan Carlos Girauta. Ellos son, de momento, los dos únicos en decir adiós, aunque la posibilidad de que se produzcan nuevas renuncias preocupa en el partido.

    Estas despedidas se suman y agravan la crisis que arrastra la formación desde hace meses. Las idas y venidas ideológicas, el viraje a la derecha, el veto al PSOE o el acercamiento a Vox fueron varios de los aspectos que criticaron voces internas y que parece que ahora han castigado los votantes en las urnas. Estos también fueron algunos de los motivos que propiciaron que dirigentes como Toni Roldán, Javier Nart o Francisco de la Torreentre otros, dejaran el partido este verano.

    BAJAS Y RUMORES

    El exdiputado de Cs por Toledo, Juan Carlos Girauta, -que no resultó reelegido el pasado domingo- ha seguido los pasos del ya expresidente de Ciudadanos. El que fuera portavoz en el Congreso en la anterior legislatura ha anunciado su despedida porque “no quiero estar sin Albert ahí”Para él, el catalán era «un magnífico líder, un hombre bueno, virtuoso y trabajador» y no se imagina continuar sin él.

    En este clima de cambios, los rumores sobre la salida de otros dirigentes han ido tomando fuerza. Asimismo algunos medios afirmaban que tanto Marcos de Quinto, número uno por Madrid tras el adiós de Rivera, o el que fuera parlamentario por Tarragona, Sergio del Campo, renunciarían a su cargo. Unas dimisiones que han desmentido los dos protagonistas. 

    De Quinto se había convertido en la mano derecha de Albert Rivera. Era el número dos en Madrid y había sido nombrado miembro de la Ejecutiva del partido, a pesar de ser bastante nuevo en política. Incluso el expresidente naranja había anunciado que lo nombraría ministro de Industria de ser elegido jefe del Ejecutivo. A pesar de su fuerte vínculo con el catalán, el empresario ha respondido ante las especulaciones sobre su despedida que “aunque no entré en política para quedarme, confirmo que voy a seguir al pie del cañón”. 

    Por su parte, Del Campo ha calificado de “fake news” las informaciones que confirman su dimisión y ha insistido en que “no va a ningún sitio”, sino que, se queda “para arrimar el hombro y luchar junto a mis compañeros para reconstruir este gran proyecto”. Una idea, la de buscar un nuevo rumbo e impulsar el partido, con la que han coincidido otros integrantes de la formación. Ahora la prioridad para volver a salir a flote es buscar a un sucesor de Rivera.

    CIUDADANOS MIRA A ARRIMADAS

    La actual portavoz de Ciudadanos, Inés Arrimadas, se perfila como la principal candidata para relevar a Rivera. La también diputada comenzó su carrera política en el Parlament catalán y consiguió situar a la formación en uno de los puesto destacados en el escenario catalán. De hecho, con ella como candidata, el partido ganó las elecciones autonómicas en la comunidad en 2017, tras el fallido referéndum de autodeterminación el 1-O.

    Arrimadas ha vivido una de las épocas más convulsas en Cataluña y su imagen no ha salido dañada. Todo lo contrario. Su capacidad comunicativa y su fuerte enganche mediático la hicieron subir puestos dentro de la estructura interna de Ciudadanos, hasta que finalmente Rivera la convirtió en su sombra. Dejó la política catalana y se convirtió en diputada nacional y portavoz en el Congreso.

    Desde este verano, Arrimadas ha asumido un rol cada vez más protagonista dentro de la formación, sustituyendo en varias ocasiones al propio Rivera. Por ejemplo, fue ella la principal dirigente en encabezar la marcha del Orgullo 2019, mientras que el presidente se encontraba en paradero desconocido. Una reforzada intervención pública que ha quedado patente durante esta campaña electoral, en la que la portavoz ha acudido a varios debates televisivos -más que el propio Rivera- y ha aumentado su presencia en actos electorales. 

    Esta trayectoria la alza como la candidata a presidir el partido. Y ya cuenta con voces a favor. El vicepresidente de la Junta de Andalucía, Juan Marín, ha asegurado que Arrimadas es “sin lugar a dudas la única persona que puede liderar a partir de ahora este proyecto político”. Ignacio Aguado, vicepresidente de la Comunidad de Madrid, también ha mostrado su apoyo a la portavoz. Precisamente este respaldo sucede horas después de que el madrileño sonara como otro posible candidato. Algo que podría haber cambiado. Otro nombre que también se ha situado en primera fila ha sido el del eurodiputado Luis Garicano, aunque de momento parece que Arrimadas gana la partida. 

    Actualmente el partido está bajo el liderazgo de José Manuel Villegas, secretario general de Ciudadanos, que tampoco ha conseguido escaño este 10-N. Aunque la formación nombrará una gestora en un plazo máximo de 15 días hasta que se convoque el Consejo Extraordinario. De momento se desconocen las candidaturas oficiales y cuándo tendrá lugar este encuentro, en el que la militancia elegirá al sucesor que reconducirá el futuro de los naranjas.