Pere Aragonès, vicepresidente de la Generalitat y coordinador nacional de ERC, ha comentado respecto a la sentencia del Tribunal Supremo contra los autores el 1-0: «Hoy se nos ha dicho que votar es un crimen. Pues volveremos a cometerlo las veces que haga falta».
Aragonès realizaba estas declaraciones frente a la sede de los republicanos junto al presidente del Parlament, el también republicano Roger Torrent; el portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, y la secretaria general adjunta de la formación, Marta Vilalta.
El vicepresidente explicaba que «no les condenan por sus ideas, les condenan por ser independentistas, y no desfalleceremos». Lo hacía durante un acto que ha comenzado con la grabación de una conversación telefónica del líder del partido, Oriol Junqueras, este mismo lunes tras publicarse la sentencia, y con otro audio de la secretaria general, Marta Rovira.
Según Aragonès, la sentencia del Supremo es una condena a la democracia del Estado español, y añadía: «Hoy han dejado escrito que cuando se trata de votar, de la libertad, de Cataluña y de la Corona, eso no es un Estado de derecho. No lo es respecto al independentismo. Y decimos que necesitamos más ante un Estado corrupto y cobarde que se atreve contra nueve pero no contra dos millones».
LA RESPUESTA ESTARÁ «EN LAS CALLES»
El mandatario también tuvo palabras para el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, que calificó el juicio a los impulsores del 1-O de procedimiento judicial ejemplar. Aragonès le reprochaba a Sánchez que «hoy se ponen a hablar de proceso judicial ejemplar cuando hemos asistido a una persecución de las ideas«.
En su intervención, el presidente del Parlament, Roger Torrent, ha asegurado que el capítulo de este lunes genera «profunda rabia, indignación y tristeza; una herida profunda, unos sentimientos que no son exclusivos de los republicanos».
Torrent ha tachado la sentencia de injusta y la condena de miserable y ha asegurado que la respuesta estará en la movilización «en las calles, codo con codo, con la mayoría de catalanes que defienden los derechos y las libertades».
Ha pedido movilizarse no con el «estómago o las entrañas, sino con el más alto sentido de la responsabilidad democrática» porque considera que les toca a los catalanes defender sus derechos.
«Lo volveremos a hacer, volveremos a estar en las instituciones y en las calles. Lo haremos por ellos, por nuestros compañeros y por sus familias», declaró el presidente.
«LA MAYOR AGRESIÓN DESDE EL JUICIO A COMPANYS»
Rovira también ha criticado la sentencia, pero ha asegurado que les dan un motivo más «para continuar caminando hacia esa nueva república y ese nuevo país» que defienden en su proyecto.
También ha advertido de que «no es momento de hacer cálculos políticos, de estar pendiente de la lectura pequeña, sino para estar a la altura del momento», de una situación que vaticina que durará muchos años.
Rufián ha asegurado la sentencia es «la mayor agresión desde el juicio farsa al presidente (Lluís) Companys», que acabó siendo fusilado, y ha alertado de que tras la sentencia del Estado, ahora toca la de los catalanes que pide que dicten en las urnas el 10 de noviembre, en las elecciones generales.
Vilalta ha defendido que la sentencia es «una venganza contra quienes imaginan un país mejor para todos» y ha asegurado que la réplica que se dará en las calles y en las instituciones, defendiendo la democracia, la república, la amnistía y la independencia.