La Guardia Civil ha incautado, en diferentes alijos, más de 11.200 kilos de hachís en los últimos cinco días. Las aprehensiones de droga han tenido lugar en las costas de Málaga, Huelva y Cádiz. Además, un total de 14 personas han resultado detenidas y se han incautado un total de diez embarcaciones y siete vehículos.
La primera de las incautaciones llevadas a cabo por los cuerpos policiales tuvo lugar cerca de las playas de Coto de Doñana (Huelva). En ella, el Servicio Marítimo pudo interceptar una embarcación semirrígida con tres motores que llevaba a bordo 120 fardos de hachís. El único tripulante de la embarcación fue detenido, al mismo tiempo que fueron incautados 3.800 kilos de hachís.
GRAN ACTIVIDAD EN CÁDIZ
El siguiente intento de alijo tuvo lugar en Conil (Cádiz), aunque la Guardia Civil fue capaz de abortarlo. Los detectó el Sistema Integrado de Vigilancia del Estrecho (SIVE) al ver una embarcación sospechosa acercándose a la costa. La misma pudo descargar 70 fardos de hachís, aunque los miembros de la tripulación, al advertir la presencia de la Guardia Civil, huyó mar adentro.
La presión policial hizo que los tripulantes abandonasen la embarcación en una playa cercana. En este caso, el peso total de los fardos intervenidos superó los 2.300 kilos de hachís.
Por otro lado, los agentes de la Guardia Civil de la Línea (Cádiz) observaron desde la costa, cómo dos embarcaciones se abarloaban para pasar diferentes bultos de una a otra, que podrían tratarse de fardos de hachís. Esto movilizó a los agentes del Servicio Marítimo de la Guardia Civil, que interceptaron una de ellas. En esta embarcación se portaban 700 kilos de hachís divididos en un total de 21 fardos. Las dos personas que iban a bordo fueron detenidas.
Otra de las intervenciones tuvo lugar en Tarifa (Cádiz), donde una Patrulla Fiscal pudo divisar un bulto a diez metros de la orilla que finalmente resultó ser un fardo de hachís. A escasos metros se hallaron otros cuatro fardos más.
Ante esta circunstancia y teniendo en cuenta que podría haber más fardos en la orilla, los agentes se movilizaron y se organizó un dispositivo, que finalmente concluyó con éxito. En el mismo se encontraron escondidos en la maleza otros 15 fardos de hachís. De esta manera, en esta intervención se lograron incautar 650 kilos de hachís repartidos en un total de una veintena de fardos.
PERSECUCIÓN POR TIERRA
En Algecirás (Cádiz) también se intervinieron 333 kilos de hachís ocultos en la baca de una furgoneta, cuando esta intentaba entrar a la Península por el Puerto, lo que derivó en la detención del conductor. En el mismo municipio tuvo lugar la incautación de 1.500 kilos de hachís en Monte Calafate, después de que la Guardia Civil divisase un alijo en la costa.
Tras la persecución de los vehículos que huyeron con el alijo, se localizaron 49 fardos que fueron arrojados y dispersos por el monte. Con motivo de esta intervención, se detuvo a dos personas y fueron intervenidos tanto los tres vehículos utilizados como la embarcación.
INTERVENCIONES EN MÁLAGA
En Málaga, concretamente en la Playa del Rincón de la Victoria, los agentes de la Guardia Civil encontraron una embarcación volcada que se encontraba a la deriva. Esta se recuperó junto a los motores que llevaba, cada uno de ellos de unos 300 CV de potencia.
En otro servicio, una patrulla del Puesto de Casares (Málaga) detuvo a un vehículo sospechoso para proceder a su identificación. En la realización de la misma se encontraron en el interior del mismo cinco pastillas de hachís, lo que derivó en la detención de sus dos ocupantes por un delito de tráfico de drogas.
Al encontrarse llaves y el mando de un garaje cercano al lugar en el que se produjo la identificación, y ante las sospechas de los agentes de que pudiera tratarse de una guardería, se continuó con las investigaciones, identificando a dos personas que acudían al garaje. Más tarde, en el interior de la vivienda se localizaron 27 fardos, en los cuales había más de 850 kilos de hachís.
Las cuatro personas identificadas, todas ellas de nacionalidad italiana, están detenidas. Además, se ha procedido a la incautación de los dos vehículos de alta gama en los que se trasladaban.
También en Málaga se detectó una embarcación semirrígida que estaba recibiendo apoyo logístico por parte de otras dos embarcaciones recreativas. La primera intentó alijar y los agentes de la Guardia Civil pudieron incautar 570 kilos de hachís repartidos en 19 faros tras intervenir a las tres embarcaciones implicadas. Por estos hechos se detuvo a un total de cuatro personas.
TRABAJO INTENSO DE LA GUARDIA CIVIL CONTRA EL NARCOTRÁFICO
Por último, en Estepona se detectó una embarcación que se dirigía a la costa. Una vez que los tripulantes advirtieron la presencia de la patrullera del Servicio Marítimo de la Guardia Civil decidieron abandonar la embarcación. Los agentes encontraron en ella diez fardos de hachís, con un total de 300 kilos.
De esta manera, los agentes de la Guardia Civil cierran cinco días de intensa actividad frente al narcotráfico en las costas del sur de España. En total, se han logrado incautar 11.200 kilos de hachís, la mayor parte de ellos en operaciones desarrolladas en el mar.
UNO DE LOS PRINCIPALES PUNTOS DE ENTRADA DE HACHÍS A EUROPA
Así, las autoridades policiales españolas mantienen su extrema vigilancia sobre la costa andaluza, uno de los principales puntos de entrada a Europa del hachís procedente de Marruecos.
Desde hace años, España es el país que más hachís incauta en todo el mundo, siendo responsable de más de la mitad de las incautaciones que tienen lugar en suelo europeo.
Tras el cannabis, la heroína es la segunda droga que más dinero mueve en el viejo continente, una sustancia que consumen más de un millón de personas y que genera casi 7.000 millones de euros anuales. A pesar de que ha habido un descenso en la demanda de heroína en la última década, ha vuelto a haber un brote de consumo de esta droga.
Por su parte, la cocaína es el estimulante ilegal más consumido de Europa. Esta ocupa el tercer puesto en el ranking de mercado, siendo consumida por unos 3,6 millones de personas. No obstante, la demanda se mantiene estable e incluso con una tendencia decreciente. En este sentido, la Península Ibérica también es el principal punto de entrada de cocaína procedente de Sudamérica.
Con estos datos, se puede ver cómo España es uno de los principales puntos de entrada de droga a la Unión Europea. Esto hace que desde los cuerpos policiales se haga un gran esfuerzo para tratar de controlar e interceptar las entradas de las mismas a través tanto de la vía marítima como de la aérea.