Isabel Díaz Ayuso se ha convertido en la séptima presidenta de la Comunidad de Madrid. La madrileña toma el mando de una de las regiones más codiciadas de España, feudo popular desde el año 1995. Y lo hará envuelta en una serie de polémicas que la enfrentan directamente con su pasado.
El préstamo fallido que Avalmadrid concedió a su padre, sus posteriores contactos con la empresa semipública, las donaciones que recibió de sus progenitores y su supuesta posición “como interlocutora” del PP madrileño en la trama Púnica han empañado la alegría por su difícil investidura.
EL PRÉSTAMO DEL PADRE DE ISABEL DÍAZ AYUSO
La nueva presidenta ha tenido que rendir cuentas por los negocios de su familia y que podrían involucrarla a ella directamente. En el año 2011, la empresa de titularidad semipública, Avalmadrid, concedió un crédito a la entidad de su padre, Leonardo Díaz, por valor de 400.000 euros y que se comprometieron a devolver en un plazo de tres años.
El ente aprobó esta operación, aún teniendo en contra la opinión de los técnicos, quienes alertaron de que las garantías que aportaron para la operación, una nave, no eran fiables. El inmueble, situado en un polígono industrial de un pueblo de Ávila, tendría un valor de mercado de 213.000 euros, según afirma la propia Díaz Ayuso. Una cantidad inferior a la concedida en el crédito.
Al poco tiempo de firmarse la operación, la empresa, MC Infortécnica SL, dejó de pagar a sus empleados y tampoco se hizo cargo del primer pago del préstamo, según adelanta InfoLibre. Avalmadrid intentó recuperar el dinero subastando la nave, pero no tuvo éxito. Actualmente el monto adeudado supera el medio millón de euros.
Isabel Díaz Ayuso renunció a la herencia de su padre, fallecido en 2014, para eludir la deuda y se desvincula del conflicto. Sin embargo, la madrileña estaba al tanto del transcurso de la operación. En unos correos publicados por InfoLibre y El País se revela que Díaz Ayuso mantuvo contacto con los directivos de Avalmadrid para interesarse por el préstamo, aprovechando su posición dentro del Partido Popular.
DONACIONES CON POLÉMICA
A consecuencia de la deuda contraída por su padre, la dirigente popular podría verse afectada por un posible alzamiento de bienes. Como adelantó InfoLibre, la madrileña aceptó en el año 2011 la donación de un piso en el barrio de Chamberí, propiedad de sus padres. Esta operación evitó que la vivienda fuera embargada a causa de las deudas que ya acumulaban sus progenitores.
Según se establece en el Código Penal se considera alzamiento de bienes “aquella conducta que el deudor practica con el objetivo de impedir que el acreedor cobre su deuda”. Y las penas por incurrir en este delito podrían oscilar entre uno y cuatro años de prisión. Por su parte, Díaz Ayuso mantiene que “estaba al margen de las gestiones empresariales de su familia.”
Y el polémico piso no fue la única donación que ha puesto en el punto de mira la integridad de la futura presidenta. Díaz Ayuso también recibió la mitad de acciones de otra empresa familiar, Sismédica SL. El resto figura a nombre de su hermano. La compañía en cuestión no pagó a lo largo de cinco años el IBI al Ayuntamiento de Madrid por un piso, utilizado para albergar oficinas. El inmueble fue embargado por otra deuda.
SU RELACIÓN CON LA TRAMA PÚNICA
Otro de los conflictos en los que se ha visto envuelta ha sido su presunto vínculo con la trama Púnica. El hermano del supuesto conseguidor de contratos de la trama, Adrián de Pedro, puso el foco directamente en la madrileña. Así se desprende de la declaración judicial que realizó en el año 2014 y a la que ha tenido acceso Vozpópuli.
De Pedro, informático de profesión, explicó ante el juez que Isabel Díaz Ayuso estuvo trabajando con los integrantes de la trama, con el objetivo de mejorar la imagen de Esperanza Aguirre. Una mejora de la reputación que el partido financiaba presuntamente con desvío de fondos públicos. La dirigente popular, en una entrevista con El Mundo, ha defendido que su nexo con ellos solo fue “por cuestiones técnicas.”
La madrileña, antes de ser propuesta como candidata a la presidencia, se dedicó a la comunicación dentro del partido. Díaz Ayuso trabajó en la campaña de Aguirre, incluso se encargaba de la cuenta del perro de la expresidenta, y también llevó la estrategia digital de Cristina Cifuentes. Este trabajo la relacionó íntimamente con ambas presidentas, aunque ella ha intentado desvincularse tras conocerse que Anticorrupción solicita la imputación de Aguirre y Cifuentes.
A pesar de todas estas polémicas, el pacto que el PP regional ha alcanzado con Ciudadanos y Vox no ha peligrado. Ambos partidos han respaldado su investidura y hacen oídos sordos al pasado de la madrileña. La proclamación de Díaz Ayuso como presidenta viene a consolidar la posición de Pablo Casado, quien apostó por ella de manera unilateral, incluso sabiendo que era un perfil político con menos experiencia.