El Ministerio de Sanidad se ha gastado 14.900 euros en la compra de lubricante y preservativos anales para repartir de forma gratuita en la manifestación del Orgullo Gay en Madrid. Según ha detallado la ministra María Luisa Carcedo, el Gobierno entregará este sábado hasta 60.000 kits con estos productos con el objetivo de prevenir enfermedades de transmisión sexual como el VIH.
«Compra de lubricante y empaquetado de preservativos extraforte (para sexo anal), para la prevención de enfermedades de transmisión sexual y VIH en hombres que tienen sexo con hombres, en el orgullo LGTBI de Madrid». Así se detalla la compra realizada el pasado 26 de junio en la web del ministerio de Sanidad. Con este acto, el ministerio pretende concienciar a todos los manifestantes sobre la importancia del uso del preservativo.
Esta compra se enmarca dentro de la campaña #SiemprePreservativo. «Tenemos el mandato constitucional de prevenir las enfermedades y esta es una oportunidad de oro para hacer esta prevención de las infecciones de transmisión sexual tanto lo que tiene que ver con el VIH, que todavía se diagnostican cerca de 4.000 casos al año, como del incremento de otras patologías de transmisión sexual», ha detallado el pasado jueves la ministra de Sanidad.
Carcedo quiso mostrar el apoyo que recibía de las asociaciones y colectivos LGTBI. Por ello, se ha reunido con la Coordinadora estatal de VIH y Sida (CESIDA), la Federación estatal de lesbianas, gays, transexuales y bisexuales (FELGTB), Apoyo Positivo, el el Colectivo LGTB+ de Madrid (Cogam), la Fundación 26 de Diciembre y COLEGAS-Confederación LGBT Española.
El vicepresidente de una de estas asociaciones, FELGTB, ha destacado que a pesar de la donación del Gobierno, este acto se basa en manifestar y reivindicar, no en celebrar una fiesta. Para Mané Fernández Noriega, el día que logren celebrar una fiesta real será el día que «vivan en libertad».
Pero no es la primera vez que el Gobierno realiza una inversión de estas características. En 2012, el Ejecutivo de Mariano Rajoy también compró preservativos para regalar el Día del Orgullo. Desde 2010, los casos de enfermedades de transmisión sexual han repuntado hasta un 23%. Especialmente la gonorrea, según los datos del Instituto de Salud Carlos III.
Se trata de una inversión que desde Vox califican como «ridícula». Aún así, el partido de Santiago Abascal ya ha aclarado su posición respecto a la celebración del Día del Orgullo Gay. «Los actos del “orgullo gay” son una imposición ideológica, vulneran derechos de los vecinos, normativas municipales y se malversan bienes y dinero de titularidad pública», destacan desde su página oficial.
Pero la diputada del partido de ultraderecha Carla Toscano no ha perdido la oportunidad de criticar los gastos del Ministerio de Sanidad. «14.900€ para compra de lubricante y empaquetado de preservativos extraforte para sexo anal en el orgullo LGTBI. Esto es lo que se hace con nuestro dinero», ha señalado Toscano en su cuenta de Twitter.
UN ORGULLO MÁS CALIENTE DE LO NORMAL
La irrupción de Vox en el panorama político ha caldeado los ánimos entre el colectivo LGTBI. Los dirigentes del partido de ultraderecha se han mostrado contrarios tanto al matrimonio homosexual como a la posibilidad de que puedan adoptar. Pero los ataques homófobos de la derecha han sido algo recurrente. Especialmente desde que el PP de la mano de Mariano Rajoy recurrió en 2005 la ley que permitiría que personas del mismo sexo se pudieran casar.
Las declaraciones no tienen desperdicio. Desde que «la pervivencia de la especie no está garantizada», según aseguró el exministro de Interior Jorge Fernández Díaz , hasta la aclaración de Rajoy en la que destacó que «el matrimonio siempre ha sido una institución entre un hombre y una mujer». Y Vox no da un paso atrás.
Una parlamentaria de la Asamblea de Madrid del partido de Santiago Abascal declaró que si su hijo fuera homosexual «preferiría no tener nietos». «Preferiría que no adoptara”, aclaró Gador Joya. Sin embargo, hay miembros del partido que son homosexuales y que defienden su derecho al matrimonio.
Pero el enfrentamiento ha golpeado también a Ciudadanos. El acercamiento de la formación naranja a Vox en las negociaciones tras las elecciones le ha valido el rechazo de las organizaciones LGTBI. Los de Rivera denunciaron el pasado 30 de junio que su autobús del Orgullo había sido atacado en Barcelona por los propios manifestantes.