Continúan las tensiones en la negociación para formar Gobierno en la Comunidad de Madrid. La candidata de Vox, Rocío Monasterio, ha dicho que no tiene problema en estar en la oposición si no hay voluntad de formar un Ejecutivo autonómico en coalición pero advierte al PP y Cs que no pidan sus votos.
Aunque el bloque de centro-derecha está condenado a entenderse sigue sin haber una predisposición para una negociación a tres bandas, en parte originada por el reparto de concejalías en el Ayuntamiento de la capital. «No hay necesidad de que pidan los votos a Vox si no quieren cumplir. Si quieren cumplir y un gobierno en coalición habrá que sentarse, ceder, negociar, ser flexibles y firmar un acuerdo», ha apostillado la dirigente de Vox.
Vox se está planteando hacer público el acuerdo con el PP en el Ayuntamiento de Madrid
Aparte, Monasterio ha asegurado que el PP «va a tener que hacer frente» a Ciudadanos si quiere acuerdos de investidura y ha calificado de «ridícula» la postura de la formación naranja, que pide «a escondidas» los votos de su formación.
En declaraciones a Onda Madrid, recogidas por Europa Press, Monasterio ha recalcado que las negociaciones con el PP en el ámbito regional están paradas al entender que en el Ayuntamiento de Madrid se cuestiona el acuerdo suscrito con Vox, que contempla la asignación de concejalías de gobierno.
«La negociación está parada hasta que el PP cumpla el acuerdo», ha insistido Monasterio para detallar que se pactó de forma informal con los populares no hacer público ese documento hasta que se ejecutara, pero visto la actitud del alcalde, José Luis Martínez Almeida, de cuestionarlo, Vox se está planteando hacerlo público. «Yo espero que el PP demuestre que es un partido serio», ha remachado.
La dirigente de Vox ha asegurado que el acuerdo recoge que Vox debe tener concejalías de gobierno y presupuesto en proporción a su peso en el Consistorio, para subrayar que ella estuvo presente en la firma de ese documento.
Posteriormente, su formación ha visto como el domingo y ayer el PP ha puesto en cuestión ese documento al trasladar esas fechas la estructura del Gobierno local, donde no hay presencia de los representantes de Vox.
«El PP tiene que dar lo que puede firmar. Y Almeida sabe que el alcalde es el que tiene todas las posibilidades sin depender de los demás, tiene un poder inmenso y en su mano está el poder cumplir«, ha dicho Monasterio en referencia a la competencia del primer edil para nombrar a los miembros de la Junta de Gobierno municipal.
«HACER FRENTE» A CS Y CUMPLIR LOS COMPROMISOS
La candidata de Vox a la Comunidad de Madrid ha insistido en que se han suspendido las negociaciones para comprobar si el PP es un «socio fiable» y conseguir que el programa de su partido, por el que ha sido votado por los madrileños, se ejecute de cara a evitar lo que pasó en Andalucía, donde Ciudadanos dijo al poco que era «papel mojado».
En este sentido, ha opinado que los populares tienen que «hacer frente» a Ciudadanos porque «ya basta» de «arrinconar y poner cordones sanitarios» a su partido.
Así, ha apuntado que Vox, como garantía de que se ejecutan las medidas comprometidas en su programa, solicita ir a fórmulas dentro de las gestión de las administraciones.
También ha recalcado que la popular Isabel Díaz Ayuso firmó con ella un acuerdo donde se recogía que Vox tendría posiciones con cargos en entes públicos, a concretar posteriormente, y presupuestos en proporción.
Preguntada sobre si habría que ir a nuevas elecciones, Monasterio ha dicho que una repetición de los comicios «nunca viene bien» a los madrileños y para ello Cs tiene que dejarse de «posiciones infantiles y de lo que ordena Emmanuel Macron« porque con esta posiciones la gente acaba «agotada».
De hecho y tras subrayar que para «negociar te tienes que sentar», Monasterio ha afeado a la formación naranja que «no pueden pretender pedir a Vox sus votos a escondidas» porque es una situación «muy ridícula».
«Los madrileños tienen que entender que es ridículo que un político te vea a escondidas para pedir tus votos», ha señalado la candidata de Vox a las dos reuniones que tuvo con su homólogo en Cs, Ignacio Aguado.