jueves, 12 diciembre 2024

El pasado del último fichaje de Vox en Baleares pone en dificultades a Abascal

  • Antoni Camps será el candidato de Vox al Consell de Menorca y aparece como reserva al Congreso.
  • El exdiputado del PP protagonizó en 2013 una dura polémica con algunos sindicatos educativos.
  • Otros fichajes del partido de Santiago Abascal también han protagonizado varias polémicas.
  • Vox acaba de incorporar al exdiputado popular en el Parlamento balear Antoni Camps como candidato al Consell de Mallorca. El nuevo fichaje asegura que deja el partido liderado por Pablo Casado por la dificultad de «defender la vida», en clara alusión al aborto, dentro de las filas del PP.

    Camps aseguró que su baja le era «dolorosa y traumática» y pidió a sus antiguos compañeros de bancada que sean «valientes» y tengan «coraje» en el Consell. Afirma que la formación que lidera Santiago Abascal renace «sin complejos» y cree que será «decisiva» en la política balear.

    Su adiós, añadió, se produjo «sin resentimiento con nadie y muy agradecido con todos sus dirigentes». Cabe recordar que el candidato fue denunciado en 2013 ante la Fiscalía por el contenido de un artículo en el que afirmaba que una huelga educativa tenía carga política.

    Camps señaló que «lo positivo de esta huelga es que sabremos, con nombres y apellidos, quienes están preocupados por el futuro de nuestros hijos y quienes por el contrario juegan con los alumnos para conseguir objetivos políticos».

    El Tribunal Superior de Justicia de Baleares archivó en 2016 la denuncia porque «expresiones desafortunadas, hirientes, chocantes, ofensivas o inquietantes, prima el favorecimiento de la formación de una opinión pública libre, condición indispensable de la sociedad democrática».

    El auto señalaba que con independencia «del desacierto, o exceso que pudiera apreciarse en algunas de las afirmaciones» que contenía, tenía una finalidad predominantemente de expresión de una opinión relativa al carácter político, y no laboral, de la huelga ya convocada y finalmente practica».

    Camps, recuerden, fue una de las pocas voces del PP balear que apoyaron en octubre del año pasado la manifestación convocada por Sociedad Cívica Balear, Convivencia Balear y el Grupo de Acción Balear.

    Según el entonces diputado, «los demócratas, ante el ataque sistemático de los partidos independentistas contra nuestro estado de derecho, tenemos la obligación de apoyar cualquier manifestación a favor del orden constitucional y la unidad de España«.

    EL CANDIDATO DE VOX EN PALMA TAMBIÉN SIEMBRA LA POLÉMICA

    El militar Fulgencio Coll, candidato de Vox al Ayuntamiento de Palma de Mallorca, realizó unas declaraciones muy polémicas hace unos días en ‘Herrera en COPE’: «Defiendo la figura militar de Franco; entiendo que haya gente que no comparta la parte política”, ha dicho. «La figura militar fue brillante».

    El candidato aseguró que «el franquismo tenía sus cosas buenas y sus cosas malas, pero no olvidemos que Franco cogió España de una Guerra Civil terrible y la dejó a las puertas de la democracia; la historia no debe usarse para abrir heridas».

    También mostró su distancia con el Partido Popular en algunas materias: «Es muy curioso puesto que quien desarrolló la ley de normalización lingüística fue el PP y ha ido aplicándola en un sentido muy perjudicial».

    La candidata de Vox Baleares al Senado, Manuela Cañadas, aseguró por su parte que su partido «defiende un feminismo sin feminazis» y explicó que su intención es que el mallorquín «salga del Estatut de Baleares».

    Otro candidato para la Cámara Alta es Antonio Salvá, padre de Diego Salvá, guardia civil asesinado por la banda terrorista ETA en Palmanova. El candidato de la formación conservadora en Calviá será Tolo Bonafé, que ocupó diversos cargos en el PP, en Lliga Regionalista y en El Pi, que surgió de los restos de la extinta y polémica Unió Mallorquina, que se disolvió en 2011 por estar inmerso en varios casos de corrupción.

    FAKE NEWS

    Més per Palma ha acusado a Vox de una falsa denuncia tras la protesta del partido conservador ante la Junta Electoral por la presencia de lazos amarillos en un balcón de un edificio público del ayuntamiento de la capital balear. La formación progresista alegó que los lazos fueron colgados en 2013 para defender el mallorquín, pero el partido de Abascal ha ganado el pulso.

    Vox
    Fulgencio Coll (izq.) junto a Chacón, Zapatero y el general Julio Rodríguez.

    Vox alegaba que un edificio público lucía «un lazo como símbolo de protesta por el proceso judicial que se sigue en el Tribunal Supremo contra los políticos catalanes». Més aseguró que este caso es «un ejemplo más de la estrategia del partido de extrema derecha de generar fake news y utilizar partidistamente los tribunales para judicializar la política y generar un clima de confrontación».

    Más polémica causo un bulo rebotado por Vox, que aseguró en sus redes sociales que «tres chicas, de 18, 15 y 13 años» habían «sido agredidas esta mañana por un grupo de feministas radicales en el aparcamiento comercial de Son Servera, Mallorca. La agresión ha venido motivada porque no han querido ponerse un lazo morado».

    Y añadían: «A una menor le han partido un diente y se encuentra en observación ante una posible fractura de mandíbula. Otra presenta magulladuras al haber sido golpeada y arrastrada por el suelo». Diario de Mallorca demostró que el suceso era un bulo y este medio sufre que Vox no le deje entrar en sus ruedas de prensa porque «se inventa noticias», cuando en realidad destapó una fake news.

    Francina Armengol, presidenta de las Islas Baleares, no tiene buena consideración del partido conservador y en el penúltimo pleno de la legislatura se negó a contestar una pregunta relacionada con Abascal: «No haré propaganda y nunca votaría a la derecha ni extrema derecha».

    José Ramón Bauzá, expresidente de la comunidad autónoma, asegura que no fichará por Vox y desmintió hace unos días su integración en la lista de Ciudadanos para las europeas. Aun así, participó en un acto organizado por el partido naranja en Cádiz.

    El también exsenador aseguró sobre el mallorquín que «lo primero que hice como presidente en Baleares» fue eliminar el requisito de su conocimiento para trabajar para la administración pública. Albert Rivera se deshizo en elogios con él: «Me alegro de estar contigo. Gente valiente que ha batallado incluso contra su propio partido».