Una de las estrategias de Pedro Sánchez de cara a las elecciones europeas es que Josep Borrell sea el cabeza de cartel de los socialistas. Pero una vez en la Eurocámara, el camino del ministro de Asuntos Exteriores enfilaría hacia la Comisión Europea, justo la misma trayectoria que realizó Miguel Arias Cañete hace un lustro.
El ministro del PP fue el elegido por Mariano Rajoy para encabezar la candidatura de los populares en las europeas de 2014 y tras un breve paso por el escaño del Parlamento Europeo, fue designado en otoño de ese año por el Ejecutivo español para formar parte de la Comisión Europea bajo la batuta de Jean-Claude Juncker.
Esa misma secuencia de actos es la que quiere Borrell a cambio de aceptar el reto de liderar al PSOE en las europeas de dentro de cuatro meses. El jefe de la diplomacia española ya fue presidente de la Eurocámara entre 2004 y 2007, así que ya tiene colmadas sus aspiraciones en esta institución europea.
Otra cosa es la Comisión Europea, que en su caso sería un extraordinario colofón a su trayectoria política, según admiten fuentes gubernamentales a MONCLOA.COM. Eso sí, todo candidato a comisario debe lograr el apoyo mayoritario de la Eurocámara y, en el pasado, ya ha habido varias personas propuestas que no han logrado superar la decisiva votación.
“La Europa abierta, cosmopolita que entiende los problemas del mundo y que sabe que tiene que aceptar a gente de fuera. Este bloque que dice que va tomar el control del Parlamento Europeo no están unidos y tienen divergencias”, señaló Borrell hace unos días.
En un desayuno informativo celebrado la pasada semana, Borrell no descartó la posibilidad de ser el próximo candidato del PSOE para las europeas y añadió que aún no había recibido la oferta por parte del Sánchez. Por su parte, el ministro manifestó estar dispuesto a luchar por los intereses españoles en la Unión Europea y destacó su valía para estar presente en diferentes cargos.
“Europa es una gran tarea que a cualquier responsable político le podría interesar trabajar en ella. Pero de momento, yo estoy en el Ministerio de Asuntos Exteriores con mucho trabajo e ilusión”, concluyó el ministro.
Miguel Arias Cañete, el comisario de Energía y Cambio Climático en Europa, ya contó con el apoyo de los populares para ejercer el cargo europeo. Fue elegido por el Gobierno de Mariano Rajoy y Juncker le encomendó la función de incrementar la seguridad en Europa en materia de energía.
Europa es una gran tarea que a cualquier responsable político le podría interesar trabajar en ella
Precisamente, las buenas relaciones entre la canciller alemana Angela Merkel y Rajoy hicieron posible que el comisario ostentase dicho cargo. Un puesto por el que la potencia Alemania ya mostró su interés.
El PP acusó en 2014 a los socialistas de no cumplir con los acuerdos de las fuerzas políticas europeas y elogió la figura de Arias Cañete para esa institución con sede en Bruselas: “La Comisión Europea estará vigilante para que esos acuerdos se cumplan y, no cabe ningún resquicio de duda, que uno de los mayores interesados de que eso sea así es el actual comisario Miguel Arias Cañete, que siempre ha defendido lo mejor para nuestro país, mientras el nuevo PSOE mira para otro lado”.
Ante el próximo final de la Comisión Juncker, Arias Cañete no tiene posibilidades de continuar en el siguiente Ejecutivo comunitario ya que cada país elige a su representante en el Colegio de Comisario y el Gobierno español es de signo socialista.
DOS ASPIRANTES MÁS SI LA OPCIÓN BORRELL NO PROSPERA
La ministra de Economía, Nadia Calviño, sería una de las favoritas para reemplazar a Arias Cañete si la opción de Borrell no prospera. La candidata cuenta a su favor su pasado como funcionaria europea y su peso en Bruselas.
Calviño defendió el europeísmo frente al escepticismo y ejerció como directora general de Presupuestos hasta la llegada de los socialistas al poder. Cuando Sánchez la colocó al frente de Economía, muchos aseguraron que era la ‘ministra estrella’ que daría credibilidad y estabilidad a las políticas económicas del nuevo Ejecutivo español.
La ministra no sería la única aspirante al codiciado puesto de representante español en la Comisión Europea. El ministro de Agricultura, Luis Planas, también estaría dispuesto a aceptar el cargo. El ministro fue eurodiputado y jefe de Gabinete de Pedro Solbes, excomisario europeo.
También ostentó el cargo de embajador de España en Marruecos y antes de ministro fue secretario general del Consejo Económico y Social europeo. Por tanto, tiene el perfil idóneo para el área de Política Agraria en la UE. Uno de los puntos fuertes del ministro es su cercanía a la vicepresidenta, Carmen Calvo. Pero, en todo caso, su opción sería la tercera para Sánchez tras descartar a Borrell y Calviño.