Teodoro García Egea dio ayer la sorpresa y anunció que el PP está dispuesto a estudiar el cierre de Canal Sur, tal y como exige el programa de sus posibles aliados de Vox. En una entrevista concedida a Antena 3 también señaló que están dispuestos a estudiar si el planteamiento «es viable o no».
«Prefiero no tener Canal Sur y tener endoscopios en los hospitales de Almería», explicó el número dos de los populares, admitiendo que las autonómicas funcionan mejor «en unos lugares mejor que en otros» y adelantando que, quizás, en Andalucía «se puede hacer el mismo servicio de forma más eficiente».
García Egea también le envió un recado a Ciudadanos, formación de la que dice que «puede no estar a la altura» porque «están pidiendo cargos que es lo que decían que no iban a pedir. En vez de ser útiles, están intentando ser importantes». Moreno Bonilla no lo tiene tan claro y afirmó ayer que para cerrar el canal habría que reformar el Estatuto de Autonomía.
CANAL SUR: VIABILIDAD EN PELIGRO
En menos de tres meses, Canal Sur cumple treinta años de vida y por primera vez su viabilidad está en peligro ante la posible exigencia de Vox al PP. No sería la primera vez que los populares echan la persiana a una televisión autonómica porque en noviembre de 2013 cerraron Canal Nou en la Comunidad Valenciana.
La Corporación audiovisual andaluza cuenta con un presupuesto para 2018 de 163 millones de euros, 140 de los cuales recibe directamente desde las cuentas de la Junta. Canal Sur y sus hermanas radiofónicas y digitales cuentan con una plantilla de 1.500 trabajadores que engullen más de la mitad del presupuesto anual.
La televisión andaluza cerró noviembre un 9,1%, según los datos de la consultora Barlovento, por lo cual crece tres décimas al mes anterior. Canal Sur Radio, Canal Fiesta, Radio Andalucía Información (RAI) y Flamenco Radio han sumado en el último EGM un total de 629.000 oyentes diarios.
UNA PROGRAMACIÓN DE DUDOSA CALIDAD
La estrella de Canal Sur sigue siendo Juan Y Medio, presentador y productor del espacio vespertino ‘La tarde aquí y ahora’, cuya mecánica se basa en presentar a varios jubilados que desean encontrar un amor, y ‘Menuda noche’, donde un grupo de niños entrevista a varios famosos.
ÍndaloyMedia, de la que el citado comunicador es fundador, accionista y estrella, factura alrededor de 40 millones de euros anuales y también pone en pie el espacio musical ‘Yo soy del sur’, que conduce cada sábado María del Monte.
Diario de Sevilla definió hace unos meses la programación de Canal Sur como «una parrilla reaccionaria, que atufa a blanco y negro, con folclore cansino, festeros y niños relamidos, y que se colorea con cierta impostura feminista, ramalazo progresista para una programación entregada a las procesiones, los vestidores de santos, los buñuelos de viento, la recolección de tagarninas y el vecindeo de abuelos casaderos».
Vox planteaba en su programa el cierre de la cadena autonómica y tras el éxito electoral del domingo no se ha olvidado. En una entrevista concedida a OK Diario, su líder estatal afirmó que Canal Sur es «una televisión de partido» que «tiene que desparecer».
Santiago Abascal también se reafirmó en «acabar con el sistema de las autonomías», hacer una auditoría «de todos los cargos enchufados en la Junta» y regular la inmigración» en función de las necesidades de la economía.
Diario de Sevilla definió a Canal Sur como como «una parrilla reaccionaria, que atufa a blanco y negro, con folclore cansino, festeros y niños relamidos»
También la regulación dependería «de la capacidad de adaptación de los inmigrantes. No todos se adaptan a vivir igual. Hay algunos inmigrantes que no se adaptan, otros que no quieren adaptarse y vienen a España a imponer sus costumbres».
¿ES CANAL SUR UNA TELEVISIÓN DE PARTIDO?
El PSOE ha utilizado a su antojo Canal Sur. Pero es evidente que la televisión autonómica no ha tenido una parrilla politizada, pese a que en sus servicios informativos sí que cuentan con un sesgo evidente.
Canal Sur se ha convertido en un paradigma de televisión del pasado con espacios folclóricos, retransmisiones taurinas, utilización de niños y ancianos en shows poco edificantes y escasos espacios vanguardistas y culturales tras la caída en desgracia de Jesús Quintero.
El paradigma de comunicador asociado a los socialistas es Tom Martín Benítez, que dirigió el Centro Territorial andaluz de TVE tras el triunfo de Felipe en 1982 y ocupó diversos cargos en RTVE hasta que la victoria de Aznar lo desplazó a Canal Sur Radio, donde conduce desde hace 21 años el espacio estrella de la emisora, ‘La hora de Andalucía’.
Joaquín Durán capitanea Canal Sur desde hace más de cuatro años de forma transitoria. El directivo se vio acorralado en 2016 por el ‘caso Ausbanc’, ya que la televisión autonómica andaluza compró varios espacios a una empresa vinculada con la compañía de Luis Pineda.
El director de Canal Sur explicó que «la propuesta para la compra de los derechos de emisión llega de la empresa Agroeditora S.L, que está constituida en 1994, e inscrita en el registro mercantil y cuyo objeto social era la edición de publicaciones y obras audiovisuales».
Durán admitió que «coincide que ambas tienen detrás a la misma persona al frente, una es una organización sin ánimo de lucro y la otra es una empresa comercial. Por tanto, nosotros contratábamos a una empresa comercial que ofrecía un producto».
CANAL SUR Y VOX
Sea como fuere, Durán cesó al número tres de la cadena, Antonio Ramírez, hasta entonces director de Estrategias y Antena de Canal Sur, tras verse salpicado por el escándalo que llevó a la cárcel al controvertido Luis Pineda.
El lunes ‘Canal Sur Noticias’ descalificaba o describía a Vox con términos como «formación ultraderechista» y apuntaba a que la opción más factible de Gobierno era una Junta liderada por Ciudadanos que contaría con el apoyo del PSOE y la abstención de Adelante Andalucía.
Pero la cadena ha rebajado el tono con el partido liderado por Santiago Abascal y ayer la televisión autonómica cursó una invitación a Vox para participar en un debate sobre los cuarenta años de la Constitución que se emitió anoche.