viernes, 22 noviembre 2024

La guerra de Ione Belarra prolonga la crisis de Podemos en Navarra

  • La fuerza emergente de Ione Belarra en Podemos se evidenció este verano.
  • La diputada morada no ve con buenos ojos el liderazgo de Eduardo Santos en Navarra.
  • Y el líder del partido de Pablo Iglesias en la Comunidad Foral no será el cabeza de cartel en 2019.

La trayectoria de Podemos en Navarra es tan exitosa como controvertida. La formación morada consiguió 7 diputados en 2015 y posibilitó la llegada de un Gobierno del cambio que se rompió la hegemonía del bipartidismo (UPN-PSN). Al año siguiente las buenas sensaciones se volvían a repetir tras ganar las elecciones generales en la Comunidad Foral, logrando la lista en coalición con Izquierda Unida encabezada por Ione Belarra tres de los cinco diputados en juego y uno de los cuatro senadores.

La fuerza emergente de Belarra, que ha cubierto el hueco de Pablo Iglesias e Irene Montero durante su baja veraniega y ha escalado posiciones en el Congreso tras la caída en desgracia de Errejón y Bescansa, ayuda al éxito.

Sin embargo, la situación nivel interno no ha podido ser más caótica: en 2015 Laura Pérez logró el liderazgo y se produjeron varias escisiones. Y el año pasado unas nuevas primarias dieron el triunfo al tándem formado por Eduardo Santos y Ainhoa Aznárez, que relevaron a Laura Pérez como portavoz morada en el Parlamento foral. Este triunfo por la mínima de la candidatura apoyada por Ione Belarra acabó con un duro enfrentamiento en el grupo parlamentario, que está partido en dos.

El sector crítico perdió su pulso y acusó de revanchismo al grupo liderado por Eduardo Santos, que relevó a Laura Pérez por Mikel Buil como portavoz en la Cámara navarra. Sin embargo los críticos se repusieron al mantener cuatro de los siete diputados de Podemos, por lo cual Buil fue sustituido por Carlos Couso y cambiaron la denominación del grupo por el de Podemos-Orain Bai, nombre con el que por ahora descartan presentarse a las autonómicas de 2019 aunque algunos de sus miembros podrían apoyar la actual plancha vecinal apoyada por Podemos en Pamplona, Aranzadi, o acercarse a EH Bildu.

Ione Belarra
La relación entre Ione Belarra y Eduardo Santos podría no estar pasando por sus mejores momentos. Foto: Facebook Podemos Navarra.

El final de la legislatura que se avecina parecía que iba a enterrar la guerra, pero la creciente distancia entre Ione Belarra y Eduardo Santos ha prolongado la misma. Hace unos días en algunos sectores del ‘Gobierno el cambio’ se decía que «Belarra le tiene puesta la cruz a Santos», tal y como ha podido averiguar MONCLOA.COM.

Y la semana pasada, el actual líder de Podemos en Navarra anunció que renunciaba a encabezar una lista electoral en la que los morados podrían confluir con Izquierda Unida y Batzarre, aunque este extremo todavía es puesto en duda por el sector duro de IU.

IONE BELARRA SABE QUE PODEMOS ES EL ESLABÓN DÉBIL

Podemos es el eslabón débil del cuatripartito que conforman junto a Geroa Bai, EH Bildu e Izquierda-Ezkerra. Todas las encuestas apuntan a una caída de la formación morada por dos razones: su negativa a participar en el Gobierno y conformarse con ‘premios menores’, véase la presidencia de la Cámara que recae en la diputada Ainhoa Aznárez, y sus grietas internas.

La propia Ainhoa Aznárez ha señalado que está dispuesta a encabezar la posible lista de Unidos Podemos, pero su pasado en el PSN y Eusko Alkartasuna ha provocado que arrastre cierta fama de ‘oportunista’.

La bicefalia de Podemos en Navarra contempla que Santos lidere la formación en la Comunidad Foral y que Aznárez lidere la lista al Parlamento. Santos se mantendrá dentro del partido y no renuncia a enarbolar el hacha de guerra contra el sector crítico, contra el que cargó hace unos días: «Poco a poco, hemos ido asumiendo este comportamiento tan anormal y tan antidemocrático con cierta resignación y ahora ya que hagan lo que quieren, Podemos es otra cosa y tiene su carril».

Carlso Couso, portavoz parlamentario del grupo Podemos-Orain Bai, le contestó que «el único círculo de Podemos que queda en Navarra es el de los amigos de Eduardo Santos, secretario general del partido. y además son pocos».

Y añadió: «El señor Eduardo Santos se ha reunido en el casoplón Uranga de Burlada en el encuentro anual de Podemos, al que solían acudir 200 personas, y se ha encontrado este año a entre 20 y 30 personas. Santos está muy nervioso porque el único círculo que queda en Navarra no son más de 20 personas y están la mitad a sueldo«.

«Santos está muy nervioso porque El único círculo que queda en Navarra no son más de 20 personas y están la mitad a sueldo«.

Asegura Couso que «lo único que hemos hecho los cuatro parlamentarios de Orain Bai es cumplir con los compromisos que adquirimos en 2015 y trabajar para sacar adelante el acuerdo programático y el programa político de Podemos».

Ahora el nuevo programa lo asumirá previsiblemente Aznárez, cuya presidencia de la Cámara navarra ha estado marcada por su obsesión por tutelar a los servicios jurídicos para evitar que el sector crítico controlase el grupo parlamentario y por su incapacidad para evitar que uno de los Parlamentos más transparentes se coloque en la cabeza de la opacidad a nivel estatal.

Veremos si Aznárez, taurina convencida y casada con el ex madridista Iñaki Arteaga, sepulta las grietas de un partido que sigue contando con un importante apoyo popular.