La transparencia en la financiación de partidos políticos es fundamental para mantener la confianza de la ciudadanía en el sistema democrático. En España, se han dado importantes pasos en esta dirección, con la aprobación de propuestas del PP y del PSOE que buscan reforzar los mecanismos de fiscalización y control sobre las cuentas de las coaliciones electorales, como Sumar. Sin embargo, aún queda trabajo por hacer para garantizar una total rendición de cuentas y evitar posibles abusos o irregularidades.
En este contexto, el artículo analiza las principales medidas aprobadas por la Comisión Mixta (Congreso-Senado) de relaciones con el Tribunal de Cuentas, así como las propuestas rechazadas, con el objetivo de comprender la complejidad del reto y las áreas que aún requieren atención.
La Reforma de la Financiación de Coaliciones Electorales
La Comisión Mixta (Congreso-Senado) de relaciones con el Tribunal de Cuentas ha aprobado una propuesta para exigir que las coaliciones electorales, como Sumar, presenten sus cuentas anuales, no solo las relativas a los procesos electorales en los que han participado. Esta medida, impulsada por el PP y el PSOE, busca ampliar el control y la fiscalización sobre estos actores políticos, que hasta ahora solo debían rendir cuentas de forma puntual.
La reforma de la Ley Orgánica de Financiación de Partidos Políticos será necesaria para implementar este cambio, ya que actualmente la obligación de presentar cuentas anuales solo recae sobre los partidos políticos que integran estas coaliciones, pero no sobre las coaliciones en sí.
Además, a iniciativa del PP, se ha aprobado otra propuesta para que el Ministerio del Interior regule el contenido mínimo para la inscripción de un partido político, tal y como recomienda el Tribunal de Cuentas. Asimismo, se insta a crear una sección específica para el registro de coaliciones electorales en ese registro.
Mejoras en la Supervisión y Control
Otras medidas aprobadas por la Comisión Mixta buscan fortalecer los mecanismos de supervisión y control sobre la financiación de los partidos políticos. Por ejemplo, se ha pedido definir claramente lo que debe entenderse por aportaciones y donaciones, para tener claro en qué cuentas bancarias deben ingresarse.
Además, se ha reclamado que se establezca como requisito en las convocatorias de subvenciones públicas dirigidas a las fundaciones vinculadas a partidos políticos que estas entidades estén inscritas en la sección específica del Registro de Partidos Políticos.
En cuanto a los microcréditos online que se hacen a los partidos, la Comisión Mixta también ha pedido imprimir un mayor control sobre estas transacciones y las personas que las realizan.
Áreas Pendientes de Mejora
Si bien se han aprobado importantes avances, la Comisión Mixta también ha rechazado algunas propuestas que podrían haber contribuido a una mayor transparencia y rendición de cuentas.
Por ejemplo, se ha rechazado la propuesta del PSOE para sancionar a los partidos que no publiquen en sus páginas web los correspondientes informes de control interno. Tampoco se ha aceptado la idea de que los partidos cuenten con órganos de vigilancia en su sistema interno de control integrados por personas independientes.
Asimismo, se han desestimado otras propuestas, como la de Vox, para definir conceptos clave como «donación finalista«, actividades ordinarias de los partidos y los beneficios que obtienen por actividades promocionales, áreas señaladas por el Tribunal de Cuentas como problemáticas.
En resumen, si bien se han dado pasos importantes, aún queda trabajo por hacer para garantizar una financiación transparente de los partidos políticos en España, pilar fundamental de un sistema democrático sólido y confiable.
