La Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) ha sido el centro de atención en los últimos meses debido a su estrategia de política monetaria en respuesta a la inflación. Lisa Cook, miembro del órgano rector de la Fed, ha ofrecido perspectivas interesantes sobre el futuro de los tipos de interés y la evolución de la economía estadounidense.
En un encuentro realizado en Nueva York, Cook ha manifestado que será adecuado reducir los tipos de interés «en algún momento» del futuro. Esta declaración se basa en la previsión de que la inflación bajará de manera paulatina a lo largo de este año, para profundizar aún más su caída en 2025. Cook ha señalado que, con avances importantes en inflación y el mercado laboral enfriándose gradualmente, será apropiado disminuir el nivel de restricción política para mantener un equilibrio saludable en la economía.
La Evolución de la Inflación: Un Camino Lleno de Baches
Según las proyecciones de Cook, las tasas de inflación a tres y seis meses vista seguirán bajando, aunque con un «camino lleno de baches«. Sin embargo, la comparativa a doce meses se moverá «lateralmente» durante el resto de este año, con datos mensuales probablemente similares a las lecturas «favorables» de la segunda mitad de 2023.
Mirando hacia el próximo año, Cook prevé que la inflación se ralentizará con mayor velocidad debido a varios factores clave. Por un lado, se espera una disminución de los cargos por servicios de vivienda, una inflación de bienes básicos ligeramente negativa y una inflación de servicios básicos, a excepción de la residencial, que se suavizaría con el tiempo.
El Impacto de los Tipos de Interés en la Economía
A pesar del impacto de los altos tipos de interés, Cook ha indicado que la economía estadounidense seguiría aguantando. Esto habría afectado negativamente a la venta de casas y a la construcción, al tiempo que habría aumentado la morosidad, a niveles que «aún no son preocupantes, pero que ameritan su vigilancia».
Por otro lado, Cook ha señalado que el mercado laboral se encontraría «más o menos» en una situación equivalente a la que había antes de la pandemia, es decir, «ajustado, pero no sobrecalentado«.
En resumen, las declaraciones de Lisa Cook, miembro de la Fed, ofrecen una perspectiva optimista sobre la evolución de la inflación y la política monetaria en Estados Unidos. La reducción gradual de los tipos de interés se perfila como una estrategia clave para mantener un equilibrio económico saludable, a pesar de los desafíos y ajustes que puedan presentarse en el camino.
