La ciudad europea que podría desaparecer bajo el agua en 2150

La ciudad europea más popular del mundo puede desaparecer y quedar sumergida en agua dentro de 126 años. La ciudad europea de Venecia, uno de los principales atractivos de Italia, puede sufrir este flagelo generando su hundimiento definitivo, según estudios del Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología (INGV).

Esta alarmante situación fue analizada por un grupo de científicos del INGV, quienes concluyeron que los niveles de las mareas en la laguna de Venecia están subiendo con una frecuencia de medio centímetro al año, lo que puede generar este desastre. Por el momento, los sistemas de barreras utilizados son la solución más efectiva aunque no la definitiva.

Qué pasará con la famosa ciudad europea

La situación de Venecia es preocupante por lo que las autoridades y científicos están en alerta por esta posibilidad. La ciudad, una de las más pintorescas de todo el continente, tiene un sistema de barreras para protegerse de las inundaciones. Este mecanismo consta de una bahía cerrada de 550 km² en el norte del Adriático, que rodea Venecia y sus islas, aunque aseguran que esto no bastará para evitar la debacle.

Los datos sobre los que trabajan los estudiosos e investigadores climáticos, se basan en estadísticas recopiladas por el centro de mareas de Venecia en los últimos 20 años y también se toman en cuenta los datos sobre hundimiento del terreno registrado entre 2008 y 2023. Lamentablemente, sobre estas mediciones se concluye que Venecia se hundiría en 2150 de manera definitiva.

Los modos de protección para la bella ciudad europea

Los modos de protección para la bella ciudad europea

Ante tan alarmantes cifras, los especialistas del Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología (INGV) aseguran que la Plaza San Marcos, reconocido epicentro turístico de la ciudad europea, quedará sumergida bajo 70 centímetros de agua. Mientras que la parte oeste de la localidad será la principal afectada debido a que fue la que más sufrió las indundaciones entre 2019 y 2023.

Por el momento, el sistema más efectivo para evitar las inundaciones severas es el MOSE, un sistema de barreras en las entradas de la laguna, pero que no tendrá un funcionamiento pleno hasta 2025. A pesar de la esperanza en este sistema se estima que, gracias al crecimiento de las mareas, las barreras móviles tendrían que levantarse con tanta frecuencia, que no podría soportalo y provocaría que la ciudad fuera «arrastrada» por las mareas y convertida en un pantano. La preservación de las marismas es otra de las soluciones a este problema, ya que, actúan como amortiguadores para proteger la ciudad de las mareas altas.