El secretario general del PSOE-M, Juan Lobato, ha defendido este domingo la necesidad de una reforma multilateral del sistema de financiación autonómica, argumentando que el actual modelo es «antiguo claramente» y no responde a las necesidades actuales de las comunidades autónomas. En este sentido, ha propuesto un sistema que «aporte a cada comunidad autónoma lo que considera que es justo para el tratamiento que debe tener».
La necesidad de un sistema justo y adaptado a la realidad
Lobato ha destacado la importancia de reconocer las singularidades de cada comunidad autónoma, incluyendo «la de Cataluña como piden algunos partidos nacionalistas, la de Cantabria y la de Madrid». Para el líder socialista, esta es la única manera de garantizar un sistema de financiación equitativo y ajustado a las necesidades de cada territorio.
Sin embargo, ha criticado la falta de propuestas concretas por parte del PP sobre cómo abordar la reforma del sistema de financiación autonómica. «No se la escuchamos cuando gobernaban con mayoría absoluta y con casi todas las comunidades autónomas del PP, no movieron un dedo para mejorar la financiación autonómica en este país y tampoco les escuchamos ahora», ha declarado.
Un sistema que responde a las necesidades de cada territorio
Para Lobato, el Partido Popular no ha presentado ninguna propuesta sobre el modelo de financiación que quieren para España. «No se atreve a hacer ni una propuesta mínima porque no salga Ayuso al momento a darle una colleja». El líder socialista ha asegurado que el PP no es «alternativa de nada» porque «ni siquiera tiene propuesta en el modelo de financiación para este país».
En definitiva, el PSOE-M apuesta por una reforma profunda del sistema de financiación autonómica que reconozca las singularidades de cada comunidad autónoma y garantice un tratamiento justo y equitativo. El partido considera que el modelo actual es obsoleto y no responde a las necesidades de las comunidades autónomas, y ha criticado la falta de propuestas concretas por parte del PP.
Es crucial que el debate sobre la reforma del sistema de financiación autonómica se lleve a cabo con transparencia y diálogo entre todos los actores implicados, incluyendo partidos políticos, comunidades autónomas y expertos. Solo a través de un proceso de consenso se podrá llegar a un modelo justo y eficaz que responda a las necesidades de todos los españoles.
