La mayoría de la población no prevé vivir hasta 130 años, pero espera cura del cáncer en próxima década

La salud es uno de los ámbitos que más evolución y cambios experimentará en los próximos años. Un sondeo realizado por Metroscopia para Periodismo 2030 y la Fundación AXA, revela interesantes predicciones sobre el futuro de la salud en las próximas tres décadas.

Este estudio, titulado «La revolución de la salud», abarca una amplia muestra de 3.000 personas y ofrece una visión sobre los principales avances y desafíos que enfrentará el sector sanitario. Desde el surgimiento de nuevas pandemias y la proliferación de superbacterias hasta la posibilidad de encontrar curas definitivas para el cáncer, el panorama presenta una mezcla de optimismo y preocupación.

Avances Médicos y Tecnológicos

Una de las predicciones más optimistas es que, en los próximos 30 años, se encontrará una cura definitiva para la mayoría de los cánceres. Según el sondeo, un 58% de los encuestados cree en esta posibilidad, lo cual refleja un notable avance en el tratamiento de esta enfermedad. Además, más del 40% prevé que serán comunes las intervenciones quirúrgicas a distancia, y más de la mitad acepta la idea de implantar chips cerebrales para mejorar las capacidades humanas.

Sin embargo, no todo es tan optimista. Los encuestados expresan escepticismo sobre la posibilidad de vivir hasta los 130 años, a pesar de los avances tecnológicos. Asimismo, un 50% no aceptaría que un robot realizara una operación quirúrgica, lo que refleja la persistente desconfianza hacia la automatización en el ámbito médico.

Desafíos y Preocupaciones

Más allá de los avances médicos, el sondeo también revela algunas preocupaciones importantes. Por ejemplo, un 70% de los encuestados cree probable que surja una nueva pandemia en los próximos 30 años, y tres de cada cuatro consideran probable que proliferen las superbacterias inmunes a los antibióticos. Estas predicciones subrayan la necesidad de estar preparados para hacer frente a nuevos retos de salud pública.

Además, el estudio señala que un 59% de los encuestados considera probable que el suicidio se convierta en la principal causa de muerte, lo que refleja una creciente preocupación por la salud mental. En esta línea, un 82% cree que las consultas médicas por problemas de salud mental serán las más frecuentes en el futuro.

Otros temas de preocupación incluyen el aumento de las adicciones digitales entre los jóvenes, la posibilidad de que los jóvenes actuales no vivan mejor que sus padres y la escasez de agua dulce como consecuencia del cambio climático.

El futuro de la salud se perfila como un escenario de avances significativos, pero también de desafíos y preocupaciones que requerirán una atención y preparación constantes por parte de la sociedad y las instituciones. Estos hallazgos deben servir como una llamada de atención para que nos anticipemos a los cambios y trabajemos en soluciones que garanticen un futuro más saludable y sostenible para todos.